México tiene gran interés de conservar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Desde hace 24 años cuando entró en vigor, México aumentó su actividad comercial con sus vecinos del norte con quienes mueve en conjunto, 2600 millones de dólares al día según cifras de la American Chamber México. Pero según analistas, desde que Donald Trump ocupó la Casa Blanca, El TLCAN, se encuentra en vilo, porque Estados Unidos, quiere reglas a modo que le favorezcan sin importar las de México y Canadá. Trump, cuida más sus intereses político-electorales, que los comerciales.
Aparte del tema automotriz que ha detenido acuerdos en las 7 rondas de negociaciones del TLCAN, está la llamada cláusula Sunset que impulsa Estados Unidos para que el acuerdo comercial permita renunciar a uno de los tres países cada cinco años. México y Canadá también se oponen. Trump quiere modificar el TLCAN, en especial con México porque su vecino del sur mantiene un superávit de casi 70 000 millones de dólares.
El presidente Trump, ha buscado por todos los medios renegociar un tratado que disminuya el déficit comercial con México, pero el equipo negociador mexicano, encabezado por el secretario de Economía, mantienen la esperanza de un acuerdo en el corto plazo, de preferencia antes de que el presidente Enrique Peña Nieto deje el cargo.
Los retos para México aumentan cada día que se acerca el cambio de Gobierno en este país. El equipo negociador mexicano, que dirige el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, se ha ganado el reconocimiento de los especialistas y hay incertidumbre de que los estadounidenses con un nuevo equipo intente presionar aun más a México para lograr un acuerdo comercial proteccionista que perjudique a sus socios comerciales.
Arturo Calvillo, Ciudad de Mexico.
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