“Al reconocer la política de una sola China, la presidenta de Honduras defiende una posición soberana, sobre la cual se basa la política exterior del gigante asiático”, aseguró en una entrevista a HispanTV el analista político internacional Carlos Santa María.
Lo acontecido es un golpe al ‘hegemón’, aseguró Santa María para luego explicar que Honduras, con esta medida, decide su camino de libertad porque tiene una gobernanza que comprende el actual escenario, en el cual el mundo se está abriendo; hoy día la multipolaridad es la gran oportunidad, de modo que todos los Estados apuestan por ir hacia un estatus de relaciones equitativas.
En Twitter, la mandataria Xiomara Castro afirmó que esta decisión muestra su determinación para cumplir el Plan de Gobierno y expandir las fronteras con libertad en el concierto de las naciones del mundo.
El plan de Gobierno de la presidenta hondureña ya tenía como un elemento básico la expansión de sus horizontes hacia países que ofrecen alternativas competitivas y en esa línea suma el significativo apoyo que le está brindando China a las naciones centroamericanas, explicó el analista.
China competitivamente abre proyectos macro, que en el caso de Honduras incluye carreteras, industria, tecnología, y ya financió una represa, de modo que ha generado la creación de nuevas condiciones, por lo que Tegucigalpa tiene al presente una relación de iguales con Pekín, acotó.
Honduras se suma a otras naciones de Centroamérica, como Panamá, El Salvador, República Dominicana y Nicaragua, que relanzaron sus lazos con China en los últimos años. Este paso de Tegucigalpa implicaría la ruptura de nexos con Taiwán.
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