“La guerra podría haber terminado en abril de 2022, cuando un acuerdo de paz estaba en la agenda”, afirmó Fico el sábado al canal de televisión estatal STVR, indicando que “sin embargo, Occidente impidió que Ucrania firmara el acuerdo”.
De acuerdo al primer ministro esloveno, Ucrania se encamina hacia un futuro potencialmente catastrófico y “nunca estará en la OTAN (la Organización del Tratado del Atlántico Norte) y tendrá inmensos problemas para unirse a la UE (Unión Europa)”, advirtió.
Asimismo, mencionó que Ucrania podría perder un tercio de su territorio debido al conflicto y tendría que aceptar la llegada de soldados de otros países.
Cabe resaltar que el presidente ruso, Vladímir Putin, ha señalado en diferentes momentos la apertura de Moscú a conversar con Kiev para acabar con el largo enfrentamiento que mantienen ambos vecinos desde febrero de 2022.
En una declaración reciente, Putin afirmó que Rusia siempre ha estado lista para las charlas de paz e incluso propuso un trato que ambas partes podían aceptar al inicio del conflicto.
Sin embargo, mencionó que las “interferencias externas” desanimaron a Ucrania de unirse a estas charlas.
Las representaciones de Rusia y Ucrania se encontraron en Estambul el 29 de marzo de 2022 y las charlas continuaron por un mínimo de tres horas.
Los fundamentos de su acuerdo inicial incluían el compromiso de Ucrania con una posición neutral y sin alianzas, además de su promesa de no instalar armas fabricadas en el extranjero, incluidas las nucleares, en su país.
Rusia tuvo que sacar sus tropas de las áreas ucranianas de Kiev y Chernigov, pero las charlas para un acuerdo fueron detenidas por el gobierno de Ucrania.
La parte ucraniana destacó que la elección se realizó por recomendación de Boris Johnson, quien era el primer mandatario británico en ese momento.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha estado presumiendo de su poder político para terminar con la guerra en Ucrania, amenazó el miércoles a Rusia con mayores aranceles y más castigos si Moscú no aceptaba un trato de cese al fuego con Kiev.
Además, Trump declaró que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, le había confesado que deseaba un tratado de paz para acabar con la guerra.
Rusia comenzó su operación militar especial en Ucrania en febrero de 2022 en parte para detener el crecimiento de la OTAN hacia el este después de alertar que la alianza militar dirigida por Estados Unidos estaba tomando una posición hostil contra Moscú.
Desde ese momento, Washington y sus aliados en Europa han llenado Ucrania con una gran cantidad de armas y balas de origen occidental, a pesar de las protestas de Moscú de que esta acción solo alargará el conflicto.
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