Por: Hiba Morad
Cuando expiró el plazo de 60 días para la retirada militar israelí del sur del Líbano el domingo, miles de personas acudieron a sus pueblos, algunos en vehículos, otros a pie, desafiando las amenazas israelíes.
El régimen israelí se negó a adherirse a los términos del acuerdo de alto el fuego y al plazo para su retirada del territorio libanés, que finalizó el domingo a las 4 am, hora local (GMT 02:00).
El portavoz militar israelí advirtió a las personas que no regresaran a sus hogares en la parte sur del país, a pesar de que las fuerzas del régimen debían retirarse y permitir el retorno de la gente.
Desafiando las advertencias y amenazas, los habitantes de Kfar Kila, Jiam y las áreas aledañas demostraron valentía y resistencia, y se dirigieron hacia lo que quedaba de sus hogares en el sur del Líbano el domingo.
En respuesta, las fuerzas de ocupación abrieron fuego indiscriminado contra ellos, matando al menos a 15 personas e hiriendo a más de 80, según el último informe. Se espera que el número de víctimas aumente.
Hablando con el sitio web de Press TV, el miembro del parlamento libanés Seyed Ibrahim al-Musawi dijo que el regreso de las personas a sus pueblos y ciudades el domingo, a pesar de las amenazas enemigas, es una clara evidencia de que están firmemente arraigados en su patria y no tienen intención de irse.
“El pueblo libanés ha tomado una decisión inquebrantable de no abandonar su tierra, a pesar de que las tropas israelíes ignoraron el plazo de retirada estipulado en el acuerdo de alto el fuego de 60 días”, afirmó.
Este espíritu perdurable, como destacó Al-Musawi, estuvo en plena exhibición en las primeras horas de la mañana del domingo, cuando miles de personas, hombres y mujeres, desafiaron las amenazas para regresar a casa.
Muchos abordaron sus vehículos y se dirigieron de regreso a los pueblos del sur. A pesar de la continua presencia militar israelí en el territorio libanés, muchos intentaron caminar las últimas millas hacia sus hogares a pie.
Imágenes y grabaciones obtenidas por el sitio web de Press TV capturaron estos momentos de desafío.
En un video, jóvenes se pararon a no más de dos metros de un tanque israelí en Maroun al-Ras, cantando vigorosamente canciones de resistencia y sosteniendo fotos del líder mártir del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasralá, mientras gritaban, Labayka Nasralá—“¡Estamos a tu servicio, Oh Nasralá!”.
Una foto mostró a soldados del régimen israelí secuestrando a dos hombres libaneses de Houla en flagrante violación del alto el fuego. Testigos presenciales que hablaron con el sitio web de Press TV informaron sobre disparos de las fuerzas israelíes contra civiles en Kafar Kila y Odeissi, hiriendo a varios de ellos.
“Mátennos a todos, permaneceremos”
En la entrada de Aitaroun, los tanques israelíes Merkava bloquearon las carreteras y dispararon contra los civiles libaneses desarmados mientras intentaban regresar a casa, lo que resultó en muertes y heridos.
“No podemos entrar al pueblo; los israelíes acaban de matar a mi primo Abed, quien nació y vivió toda su vida en Aitaroun”, le dijo Hasan al sitio web de Press TV.
A pesar de estas brutales acciones, la gente permaneció imperturbable y juró regresar a sus pueblos.
“Regresaremos; no hay otra opción”, recalcó Hasan. “Los israelíes son lo suficientemente tontos como para no entender que no nos vamos a ir a ningún lado. Apoyamos la Resistencia y nuestra tierra hasta nuestro último aliento. Permaneceremos en nuestra tierra, incluso sobre montones de escombros”, agregó.
Cuando el acceso en vehículos se hizo imposible, cientos de personas continuaron su viaje a pie.
“Ahora estamos caminando a pie, por los caminos destruidos por las tropas israelíes. No nos importa si todavía están allí; ellos deben irse pronto. Esta tierra es nuestra tierra”, indicó una mujer al sitio web de Press TV.
Ahmad, caminando hacia Mais al-Jabal con muletas acompañado de su hermana, dijo que eligió venir a pesar de sus complicaciones de salud para demostrar su apoyo a la Resistencia.
“Estoy aquí hoy con una pierna rota debido a un ataque israelí previo en Beirut durante la guerra. Fui operado dos veces, pero aún así elegí venir hoy, aunque no es fácil caminar con mis muletas sobre los caminos destruidos”, declaró Ahmad al sitio web de Press TV.
Resistencia: La elección del pueblo, cueste lo que cueste
El legislador Al-Musawi afirmó que a pesar de las amenazas y los peligros debido a la ocupación militar israelí, el pueblo libanés sigue comprometido con la Resistencia y la causa.
“Ya hemos visto a una docena de ciudadanos libaneses secuestrados o heridos, con algunos mártires. Pero el pueblo libanés elige la resistencia, cueste lo que cueste”, expresó al sitio web de Press TV.
“El enemigo israelí busca vaciar estos pueblos. Han quemado vastas áreas, destruido casas e instituciones, y sembrado desesperación y desesperanza, obligando a la gente a irse”, apuntó.
El parlamentario libanés se apresuró a agregar que cuando los habitantes del sur regresan a sus casas y huertos, es una señal de su vínculo inquebrantable con la tierra y su Resistencia.
“Este es el derecho del pueblo, el derecho de todos los que creen en la independencia y la libertad de esta tierra y valoran los sacrificios de los mártires”, comentó.
“Es un deber nacional apoyar esta causa”, puntualizó.
Al-Musawi también llamó a la comunidad internacional, al comité de monitoreo del alto el fuego, al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) y a la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL) por su inacción.
“Las violaciones israelíes y los eventos en curso son muy peligrosos. Implican que el enemigo israelí no está dispuesto a cumplir con ninguna obligación y está menospreciando las leyes y resoluciones internacionales, convencido de que no se tomará ninguna acción contra él a nivel internacional”, remarcó.
Condenó los pretextos y excusas israelíes, afirmando, “El período de alto el fuego de 60 días fue más que suficiente para examinar la zona y asegurarse de que estuviera libre de armas, como afirmaron”.
Resistencia Justificada
Layla, de pie en la entrada de Aitaroun, expresó tanto frustración como determinación.
“Cuando Hezbolá defendió al Líbano, los israelíes no se atrevieron a cometer tales violaciones. Estamos aquí hoy para expulsarlos nuevamente”, explicó al sitio web de Press TV.
“¿Dónde están todas las promesas del mundo de que Israel se retirará? ¿Por qué todos están callados hoy? ¿Dónde está el Estado libanés?”, cuestionó.
Temprano en la mañana, Layla y su familia regresaron, a pesar de saber que su casa había sido destruida durante la reciente guerra que creó una crisis humanitaria a gran escala en el país árabe.
Layla, como muchos otros en el sur hoy, reiteró lo que el parlamentario libanés señaló, que la presidencia libanesa, el gobierno y el ejército deben defender a los civiles y reclamar la tierra.
“El statu quo es muy peligroso. Hezbolá sigue dando una oportunidad real a quienes ofrecieron compromisos y garantías para terminar con la agresión israelí y la retirada. Los eventos actuales subrayan la necesidad de Resistencia en el Líbano”, adujo Al-Musawi.
“La Resistencia demostró que, cuando estaba en el terreno, lista para enfrentar la agresión, el enemigo israelí pensaría mil veces antes de actuar. Hoy, ningún acuerdo internacional ni obligación puede detener a la ocupación israelí de cometer más violaciones”, apuntó.
El pueblo libanés tiene el derecho de tomar medidas para liberar y defender su tierra, conforme a las leyes internacionales, las convenciones de derechos humanos, las leyes internacionales humanitarias y el Acuerdo de Taef, dijo el legislador al sitio web de Press TV.
“Lo que ocurrió hoy demuestra que los libaneses siempre deben tomar la iniciativa para defenderse, porque el Estado es, lamentablemente, incapaz de cumplir con sus tareas, dejando un vacío que obliga al pueblo a establecer su movimiento de Resistencia y confrontar al enemigo israelí”, subrayó.
De manera pertinente, a principios de este mes, el enviado especial de Estados Unidos, Amos Hochstein, dijo a los funcionarios libaneses que las tropas israelíes se retirarían del sur del Líbano antes de que termine el alto el fuego de 60 días.
Según el acuerdo alcanzado en noviembre, las fuerzas israelíes debían abandonar el Líbano en un plazo de 60 días, antes del 26 de enero, a cambio de la evacuación por parte de Hezbolá del río Litani, que está a unos 30 kilómetros (18 millas) de la frontera, y el desmantelamiento de cualquier infraestructura militar restante en el sur.
Durante este período, las fuerzas de ocupación han llevado a cabo ataques casi diarios contra el Líbano, en violación del alto el fuego, incluidos ataques aéreos en todo el país árabe.
El ex primer ministro libanés Nayib Mikati anunció a principios de este mes que Beirut había enviado un “mensaje claro” a los observadores internacionales del acuerdo de alto el fuego con Israel, indicando que el régimen debe retirar completamente sus fuerzas del sur del Líbano antes de que termine enero.
“Advertimos en contra de continuar violando el entendimiento del alto el fuego porque amenaza todo el acuerdo, lo cual es algo que no creo que nadie quiera que suceda”, señaló en una reunión con Hochstein en Beirut el 6 de enero.
El 10 de enero, Líbano presentó una queja ante el Consejo de Seguridad de la ONU por los actos de agresión israelíes en tierras agrícolas y ganaderas en el sur del país, en violación del acuerdo de alto el fuego.
Esto fue seguido por la elección del juez de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), Nawaf Salam, como el nuevo primer ministro del país, después de que recibiera suficientes votos de los legisladores libaneses.
En su primer discurso como primer ministro, Salam dijo que trabajaría para “imponer la retirada total del (enemigo) israelí de cada pulgada ocupada de nuestra tierra”.
Joseph Aoun, quien fue elegido como presidente del país, en una reunión con el secretario general de la ONU, António Guterres, el sábado, denunció que el régimen israelí continúa violando el acuerdo de alto el fuego.
En una declaración el domingo, después de nuevos ataques contra los libaneses que regresaban a sus hogares en el sur, Aoun puso de relieve que la soberanía y la integridad territorial del Líbano son “innegociables”.
Sin embargo, el pueblo libanés cree que el nuevo gobierno en Beirut hasta ahora ha fracasado en obligar al régimen israelí a cumplir con los términos del acuerdo de alto el fuego.
Texto recogido de un artículo publicado en Press TV.