El 7 de septiembre, el alto representante para Asuntos Exteriores y Políticas de Seguridad de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, nombró al diplomático español Rafael Dochao Moreno como su nuevo embajador en Venezuela. El designado llegó a Caracas, capital venezolana, el 9 de septiembre donde estará acreditado como encargado de Negocios, según un comunicado del bloque.
“Con su nombramiento, se busca seguir manteniendo un diálogo tanto crítico como constructivo con el país y sus representantes” y constituye “un paso adelante en el restablecimiento de las relaciones entre Venezuela y la UE”, declaró Borrell al respecto.
Este nombramiento coincidió con la investidura de la diplomática portuguesa, Isabel Brilhante como la embajadora de los Veintisiete en Cuba. La nombrada fue declarada persona no grata y expulsada de Caracas en febrero por orden del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en respuesta a las sanciones económicas impuestas por dicha organización contra integrantes del Ejecutivo venezolano.
La simultánea designación de estos dos jefes de misiones diplomáticas de la UE, de acuerdo con el medio venezolano de análisis político La Tabla, podría “interpretarse como una normalización de las relaciones de Europa” con Cuba y Venezuela.
#ParaQueConste UE coloca -casi en simultáneo- nuevo Jefe de Misión en Venezuela y embajadora en Cuba. La acción puede interpretarse como una normalización de las relaciones de Europa con el "eje del mal". La diplomática enviada a la isla fue expulsada por Caracas en febrero. pic.twitter.com/Yspwl1NOKS
— La Tabla (@latablablog) September 9, 2021
Hasta ahora, la Unión Europea, siguiendo los pasos de EE.UU., ha impuesto sanciones tanto a Cuba como a Venezuela. De hecho, Venezuela se convirtió en 2017 en el primer país latinoamericano en ser sancionado por el bloque europeo.
En cuanto a Cuba, la UE ha manipulado las noticias vinculadas a las manifestaciones del 11 de julio contra la compleja situación económica, provocada por el recrudecimiento del bloqueo estadounidense contra la isla, incluso en el tiempo de la pandemia.
Sin embargo, los expertos no descartan que la postura hostil de los Veintisiete pueda cambiar por la influencia de los diálogos en curso entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana.
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