Sira Rego y Manu Pineda, eurodiputados de la formación española Izquierda Unida (IU), han exigido este martes explicaciones a la Comisión Europea por incluir dos empresas israelíes del sector de inteligencia y ciberseguridad relacionadas con el ejército y el servicio de inteligencia del régimen israelí (Mossad) en un proyecto sobre seguridad en las ciudades europeas financiado con fondos de Horizonte 2020, un programa de investigación e innovación de diversas áreas temáticas en el contexto europeo.
La primera de las empresas es XM Cyber, fundada por Tamir Pardo, director del Mossad entre 2011 y 2016. La otra es Sixgill, creada por Avi Kasztan y Elad Lavi, ambos han colaborado en multitud de proyectos de desarrollo tecnológico para las fuerzas militares de Israel.
Los europarlamentarios solicitaron información sobre las asignaciones que han recibido dichas empresas en el proyecto europeo Gestión Inteligente de procesos, éticas y tecnología para la seguridad urbana (IMPETUS, por sus siglas en inglés) y demandan pruebas tangibles de que ambas compañías cumplen con los principios éticos del programa Horizonte 2020, es decir, con la legislación europea e internacional en materia de derechos humanos y la Política Exterior y de Seguridad Común.
“La UE debe suspender su relación con compañías y personajes que o han violado o ayudan a violar los derechos humanos de la población palestina. Máxime, cuando la amenaza de anexión [de Cisjordania] sigue vigente. El proyecto Horizonte 2020 no puede servir para promover las actividades de estas empresas y enriquecer a sus creadores”, aclara Pineda.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció hace unos meses que pretende ejecutar la anexión del 30 % del Área C de Cisjordania, incluidos todos los asentamientos israelíes, a partir de 1 de julio. El plan ha recibido un rechazo total y absoluto de la comunidad internacional.
La Unión Europea (UE), por medio de su máximo representante de la política exterior, Josep Borrell, advirtió al régimen israelí de que habrá consecuencias significativas en las relaciones bilaterales si sigue con su plan de anexión de Cisjordania, sin llegar a concretar en qué medidas se traducirán estas consecuencias.
En este sentido, Pineda ha lamentado que los israelíes, a sabiendas de que estas admoniciones no pasan más allá de simples declaraciones, pisotean impunemente tanto los derechos de los palestinos como el derecho internacional.
Por ello, este político español ha subrayado que si la UE quiere evitar la anexión parcial de Cisjordania debe empezar a mostrarle al régimen de Israel que no todo vale, por ejemplo, suspendiendo el Acuerdo de Asociación y anulando la participación de las empresas y universidades israelíes en todos los proyectos que el bloque regional tenga en marcha, incluido el de Horizonte 2020.
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