El Centro de Operaciones de Emergencia en el Ministerio de Salud Pública del Líbano confirmó en un comunicado que la persona murió a causa del ataque, marcado por un intenso intercambio de disparos entre el ocupante sionista y Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).
Asimismo, se ha confirmado que entre los siete heridos se encuentran cuatro menores, quienes fueron atendidos en la sala de emergencias sin necesidad de ser hospitalizados.
Medios locales reportan que el bombardeo fue perpetrado por un avión no tripulado o dron israelí y tuvo como objetivo una vivienda en Ahmadiya, en el distrito de la Bekaa Occidental.
Reportes indican que otro ataque con drones israelíes golpeó las afueras de la aldea de Houla, también en el sur de El Líbano. Mientras tanto, aviones de guerra israelíes llevaron a cabo un ataque aéreo en la aldea de Blida. El ocupante bombardeó asimismo con artillería las aldeas de Taybeh, Alma el-Shaab y al-Dhahira.
La aldea de Al-Jebbain, las afueras de las aldeas de Majdal Zoun y Zibqine y las aldeas de Marwahin y Boustane también estaban entre las zonas atacadas por el régimen.
Por su parte, Hezbolá utilizó “armas apropiadas” contra una concentración de fuerzas israelíes en el puesto de Baraka Risha este propio viernes, dejando tropas muertas o heridas. Los combatientes de la resistencia libanesa también dispararon misiles Burkan al puesto de Hadb Yarin, lo que produjo “impacto directo”.
La resistencia también atacó con misiles los búnkeres de artillería israelíes en Zaoura. Un exitoso ataque con aviones no tripulados libaneses también alcanzó la base de Filón, en la ciudad de Safed, al norte de los territorios ocupados.
Horas antes, Hezbolá había lanzado una andanada de cohetes Katiuska contra la “principal base de defensa aérea de misiles” del Comando Norte, en el cuartel de Berea, cerca de Safed. La acción se produjo en represalia por el ataque mortal que afectó el jueves a la aldea de Kfar Jouz.
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