El Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) llevó a cabo el domingo unas maniobras militares de una envergadura sin precedentes en el sur del territorio libanés, con disparos y explosiones contra objetivos marcados con banderas israelíes.
Los ejercicios militares del domingo fueron sin precedentes, y transmitieron el mensaje de estabilidad y disuasión de Hezbolá, las cuales hicieron posibles las victorias [alcanzadas durante las guerras del pasado con Israel], destacó el lunes el sheij Naim Qasem, vicesecretario general de Hezbolá, mientras se dirigía a un seminario político en el sur de El Líbano.
Señaló que el régimen “sionista entiende muy bien el significado” de esta pomposa demostración de fuerza, que, según dijo, mostraba también la disposición de Hezbolá para contrarrestar cualquier agresión israelí y defender a El Líbano.
“Nuestras armas sólo serán empleadas contra el régimen sionista”, aseguró Qasem, y detalló que “lo que ha impedido que Israel invada El Líbano durante los últimos 17 años son las armas de la Resistencia y nada más”.
Hizo hincapié en que, si no fuera por las armas de Hezbolá, El Líbano nunca sería liberado de la ocupación israelí. “Un Líbano fuerte debe permanecer estable y nosotros somos uno de sus pilares”, señaló el destacado clérigo, diciendo que Hezbolá nunca permitiría que el país regrese a “la época de debilidad”.
Los ejercicios militares de Hezbolá tuvieron una gran resonancia a nivel internacional, en particular en los medios de comunicación israelíes. En los entrenamientos, combatientes enmascarados dispararon desde la parte trasera de motocicletas e hicieron estallar banderas israelíes colocadas en las colinas y un muro que simulaba el de la frontera de facto entre El Líbano y la Palestina ocupada.
Algunos analistas y estrategas militares israelíes consideraron los ejercicios como un entrenamiento para practicar un ataque a los territorios ocupados y liberar Palestina.
El jefe del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, Seyed Hashem Safieddin, advirtió el domingo que la Resistencia libanesa poseía misiles guiados de precisión listos para alcanzar todos los territorios ocupados, en caso de cualquier estupidez israelí.
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