El régimen de Israel continúa la construcción de un muro en la frontera sur con El Líbano. Su intención es alargarlo unos 6 kilómetros, y ya han levantado 300 metros. Las expectativas israelíes, sin embargo, puede que no se cumplan. Este rompecabezas de líneas de alto el fuego y demarcaciones de fronteras ha hecho que la tensión aumente.
Los puntos territoriales que el régimen de Israel desea se unen a otros marítimos. El bloque 9, frente a la costa libanesa es el más jugoso para Tel Aviv. El asistente estadounidense de Asuntos de Oriente Medio, David Satterfield, se reunió este miércoles en Beirut (capital) con el ministro de Exteriores libanés, Gebran Bassil.
Pero ¿Está Israel levantando un escudo antes de lanzar un ataque a la soberanía libanesa? Mientras las fuerzas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) patrullan entre libaneses e israelíes, Tel Aviv se acerca con khutzpa, sin vergüenza, a los límites del casus belli con El Líbano.
Sea o no mera retórica belicista israelí, tanto el Ejército como el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) afirman estar preparados para responder ante cualquier ataque a su soberanía, tanto por tierra como por mar.
Isabel Pérez, Naqura.
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