Mediante un comunicado emitido el viernes, el Comando del Indo-Pacífico de Estados Unidos confirmó que un avión de reconocimiento P-8A Poseidon de la Armada del país sobrevoló el estrecho de Taiwán, una zona altamente sensible entre China y la isla.
Tras asegurar que EE.UU. continuará volando, navegando y operando sus vuelos en el estrecho de Taiwán, la nota declara que el referido tránsito muestra “el compromiso de Estados Unidos con un Indo-Pacífico libre y abierto”.
Este vuelo se produjo dos días después de que el Ministerio de Defensa chino dijera que 29 aviones de combate de este país entraron en el espacio aéreo de Taiwán, entre ellos aeronaves de combate, de control y alerta temprana, de guerra electrónica, antisubmarinos, inteligencia electrónica y reabastecimiento aéreo.
China considera a Taiwán como parte integrante de su territorio y sigue denunciando las cooperaciones entre Washington y Taipéi en materia militar.
La cuestión de Taiwán ha llevado a los observadores a alertar del estallido de una guerra, a medida que Estados Unidos fortalece su presencia militar en aguas próximas a China y refuerza la ayuda militar a Taipéi, así como los contactos diplomáticos con la isla, que Pekín considera parte de su soberanía.
Esto, mientras que el número de vuelos de reconocimiento de EE.UU. en el mar de la China Meridional ha crecido ostensiblemente. Expertos opinan que, mediante tales medidas provocadoras, Washington solo activa un sinnúmero de medidas de respuesta de Pekín.
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