• Un empleado de la empresa petrolera rusa Rosneft Trading pasa por delante del logotipo cooperativo de la compaña.
Publicada: martes, 25 de febrero de 2020 2:21

EE.UU. intensificará su campaña de sanciones contra el sector petrolero de Venezuela con el foco puesto en todo aquel que viole sus medidas coercitivas.

El enviado especial de EE.UU. para Venezuela, Elliott Abrams, aseguró en una entrevista con la agencia de noticias británica Reuters, cuyo contenido se ha publicado este lunes, que Washington planea perseguir a los clientes habituales del crudo venezolano, incluidos los asiáticos; en una clara referencia al Rosneft Trading, la filial comercial de la compañía petrolera estatal rusa Rosneft.

De acuerdo con Abrams, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha ordenado aumentar la presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro, castigando no solo a los compradores del crudo venezolano sino a todos los intermediarios que ayuden a Caracas a ocultar el origen de su petróleo.

La agresiva campaña de presión de Washington no se centrará únicamente en Rusia, sostuvo el funcionario estadounidense, sino que perseguirá a todas las empresas y entidades intermediarias que infrinjan las sanciones de la Casa Blanca contra la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). 

 

Rosneft Trading es un intermediario. ¿Qué pasa con los clientes que se encuentran principalmente en Asia? Estaremos hablando con ellos. Por lo tanto, no se trata de una campaña centrada en Rusia, se centra en los puntos críticos del sector petrolero, desde la producción hasta el envío a los clientes”, subrayó el enviado especial norteamericano.

El anuncio llega casi una semana después de que Estados Unidos sancionara a la filial de la petrolera estatal rusa Rosneft por sus operaciones comerciales con el Gobierno del presidente, Nicolás Maduro.

Desde 2017, EE.UU. ha impuesto más de 150 sanciones contra Caracas con el objetivo de acabar con el Gobierno legítimo de Maduro. En un caso reciente, el 7 de febrero, Washington impuso sanciones contra la aerolínea estatal venezolana Conviasa.

Por su parte, Moscú, uno de los mayores aliados de Caracas, ha denunciado abiertamente los complots, la injerencia en asuntos internos y los planes golpistas de EE.UU. contra el Ejecutivo de Maduro, y ha rechazado las peticiones del país norteamericano de dejar de comerciar con Venezuela.

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