En un discurso realizado el jueves en la Cámara de Comercio, Industrias, Minas y Agricultura de la provincia de Fars, sur de Irán, la ministra de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil, Tereza Cristina Corrêa da Costa Dias, destacó que el principal objetivo de su visita al país persa es dar seguimiento al equilibrio comercial con la República Islámica.
Dirigiéndose a los participantes en la reunión, la ministra brasileña señaló que el país latinoamericano quiere mantener las exportaciones a Irán y ampliar las importaciones de la República Islámica con el fin de alcanzar un equilibrio comercial en los intercambios agrícolas.
En cuanto al objetivo de su visita a Irán, dijo que Brasil está interesado en mejorar la cooperación agrícola, porque todos los países deben ayudar a suministrar alimentos de calidad y asequibles en todo el mundo.
“Dada la capacidad tecnológica y la calidad de las tierras para el cultivo en Brasil, el país está dispuesto a atraer a los inversores iraníes; por lo tanto, las negociaciones cara a cara pueden ayudar a alcanzar un consenso en este sentido”, argumentó.
Refiriéndose al hecho de que la agricultura y la ganadería son modernas y desarrolladas en el país latinoamericano, la ministra dijo que Brasil puede ayudar a otros países en términos de seguridad alimentaria debido a su avance en este campo.
También mencionó las estadísticas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), afirmando que la demanda de alimentos aumentará hasta un 60 %, por lo que los países productores de alimentos deberán desarrollar e implementar nuevos métodos de cultivo y cosecha.
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Al frente de una delegación compuesta por 30 comerciantes y empresarios brasileños, Tereza Cristina Corrêa da Costa Dias, llegó el jueves a la provincia de Fars donde ha mantenido reuniones con las autoridades locales y destacados empresarios. Se prevé que la ministra brasileña viaje este viernes a Teherán (capital iraní) para abordar la facilitación de los lazos comerciales y económicos con las autoridades persas.
La República Islámica ha aumentado la cooperación económica con Brasil. Tras los embargos económicos de Estados Unidos a Irán, el gigante latinoamericano se ha convertido en un nuevo destino para las exportaciones de productos petroquímicos iraníes, entre otros.
En un intento de potenciar las cooperaciones bilaterales, Irán busca también poner en marcha, en un futuro próximo, la primera línea de transporte marítimo directo a Sudáfrica y los países latinoamericanos. Dicha línea naviera conectará los puertos meridionales de Irán con los de Sudáfrica y luego con las terminales latinoamericanas, específicamente las de Brasil.
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