En una sesión especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) celebrada el miércoles por el 35.º aniversario de la Conferencia Internacional de Naciones Unidas sobre la Población y el Desarrollo, Humberto Rivero denunció que el recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba impone grandes obstáculos para el desenvolvimiento de las políticas nacionales de población y desarrollo.
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Además, el alto funcionario cubano rechazó la reciente activación del Título III de la Ley Helms-Burton, que impone más trabas al país al impedir que Cuba tenga amplias relaciones comerciales con empresas internacionales y otras naciones.
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“A pesar del ilegal bloqueo, Cuba ha logrado importantes avances, brindando atención priorizada a políticas poblacionales intrínsecamente ligadas a la plena equidad y justicia social (...) Todos los cubanos tienen acceso universal y gratuito a la salud y educación en todos los niveles, 100 por ciento de la población está alfabetizada”, indicó.
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A pesar del ilegal bloqueo (de EE.UU.), Cuba ha logrado importantes avances, brindando atención priorizada a políticas poblacionales intrínsecamente ligadas a la plena equidad y justicia social”, indicó el embajador de Cuba ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Humberto Rivero.
Rivero resaltó que el 53,2 por ciento del Parlamento está integrado por mujeres, de hecho, añadió que, Cuba ocupa el segundo lugar a nivel mundial con mayor presencia de mujeres parlamentarias.
Como otro logro alcanzado por la isla pese a los obstáculos de Washington ya mencionados, el diplomático cubano se refirió a la tasa de mortalidad infantil en la isla que tuvo un registro de 4,0 por cada mil nacidos vivos.
Desde 1960, los sucesivos gobiernos de Estados Unidos han impuesto un bloqueo y múltiples sanciones contra el país caribeño, que han impedido a la mayor isla de las Antillas desarrollar su potencial social y económico.
Sin embargo, las sanciones estadounidenses a Cuba, se han intensificado desde la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump en 2017, dejando sin efecto el acercamiento que propició su antecesor, Barack Obama.
Washington para presionar cada vez más a Cuba y seguir su manera imperialista hacia la Isla, activó en mayo el Título III de la ley Helms-Burton, que autoriza a los cubanos exiliados en EE.UU. y a las empresas de ese país a demandar a quienes se beneficiaron de las nacionalizaciones hechas tras la victoria de la Revolución Cubana en 1959.
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