De acuerdo de la emisora pública israelí KAN, esta semana, al menos 20 soldados israelíes se han negado a regresar a Gaza, donde las fuerzas de ocupación han estado cometiendo crímenes de guerra y violaciones de los derechos humanos al matar indiscriminadamente a civiles palestinos.
Según informes, al menos 10 de esos soldados disidentes han recibido advertencias oficiales del ejército y los han amenazado con enfrentar juicio por su negativa a regresar al frente de guerra en Gaza.
Las familias de algunos de los soldados, citadas por la emisora, han declarado que los uniformados se ven obligados a realizar maniobras terrestres en Gaza o se enfrentan a la cárcel”, lo que ha provocado que algunos de ellos se ofrezcan a volver al servicio en zonas distintas de Gaza.
“En su compañía solo quedan unos pocos soldados capaces de luchar”, afirmaron los familiares de los soldados. “Este es nuestro momento como padres para ayudarlos a enfrentarse a un sistema que no se preocupa por ellos”, añadieron.
La amenaza de juicios y acciones legales inminentes contra soldados israelíes se produce en medio de casos cada vez mayores de soldados disidentes que se niegan a seguir luchando en Gaza, ya sea debido a los continuos crímenes de guerra de las fuerzas de ocupación o debido a la creciente percepción de que el Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) no puede ser derrotado tan fácilmente como el régimen sionista adujo al emprender la guerra el 7 de octubre.
El ejército israelí continúa su guerra genocida en Gaza e ignora las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) y la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que exigen un cese inmediato de las hostilidades en la Franja donde ha matado a 40 602 palestinos.
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