Lynn Maalouf, directora de investigación de AI para Oriente Medio, ha dicho este viernes que el organismo pro derechos humanos tiene serias preocupaciones de que Al-Awdah —de 61 años de edad— podría ser condenado a muerte y ejecutado al encontrarse en juicio en el “Tribunal Penal Especializado” de Riad (capital saudí) el 28 de julio.
“Estamos gravemente preocupados de que el sheij Salman al-Awdah pueda ser condenado a muerte y ejecutado. Desde su arresto, hace casi dos años, sheij Al-Awdah ha vivido una terrible experiencia, incluida la detención preventiva prolongada, los meses de reclusión en régimen de aislamiento, la detención en régimen de incomunicación y otros malos tratos, todas violaciones flagrantes de su derecho a un juicio justo”, ha denunciado.
La directora también ha subrayado que el próximo juicio de sheij Al-Awdah, así como los juicios de otros activistas, incluidos los 37 hombres que fueron ejecutados en abril pasado, tienen motivaciones políticas y están destinadas a silenciar las voces independientes en Arabia Saudí.
Estamos gravemente preocupados de que el sheij Salman al-Awdah pueda ser condenado a muerte y ejecutado. Desde su arresto, hace casi dos años, sheij Al-Awdah ha vivido una terrible experiencia, incluida la detención preventiva prolongada, los meses de reclusión en régimen de aislamiento, la detención en régimen de incomunicación y otros malos tratos, todas violaciones flagrantes de su derecho a un juicio justo”, dice Lynn Maalouf, directora de investigación de Amnistía Internacional para Oriente Medio.
Conforme ha explicado Maalouf, el clérigo está siendo castigado ya que ha estado pidiendo una sociedad más inclusiva que ponga fin a la marginación de los ciudadanos chiíes en la monarquía árabe.
Por la misma razón, ha proseguido, las mujeres y los defensores de los derechos de las mujeres, que han pedido mayores derechos, también son castigados. “¿Qué beneficios esperan lograr las autoridades al tratar a sus propios ciudadanos de esta manera?”, se ha preguntado.
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En este contexto, ha enfatizado que en lugar de seguir adelante con este juicio falso, resulta imprescindible que el reino árabe libere de inmediato y sin condiciones a sheij Al-Awdah y retire todos los cargos en su contra.
El aumento exponencial de la represión, el arresto y la encarcelación por Riad de activistas a los que, además, se somete a brutales torturas, agresiones sexuales incluidas, forman parte de las violaciones de los derechos humanos que son denunciadas en reiteradas ocasiones por diferentes oenegés y organizaciones pro derechos humanos, como Human Rights Watch (HRW).
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La asociación contra la pena de muerte Reprieve, con sede en el Reino Unido, dijo en 2018 que la tasa de ejecuciones en Arabia Saudí se había duplicado desde el nombramiento de Muhamad bin Salman como príncipe heredero en 2017.
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