El portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Yemen, Iscander Said, ha comentado este sábado en una rueda de prensa en la ciudad de Saná, la capital, el proceso llevado a cabo por Ansarolá.
“El movimiento popular yemení Ansarolá ha liberado hoy de forma unilateral a 153 prisioneros de guerra”, afirmando que “el CICR ha facilitado la iniciativa con el objetivo de alentar a todas las partes a avanzar en esta cuestión humanitaria y liberar a los prisioneros”, ha apostillado.
El viernes, el jefe del Comité Nacional de Asuntos Prisioneros, Abdul Qader al-Murtada, indicó que Ansarolá liberaría a una docenas de prisioneros, calificando la medida de “iniciativa humanitaria unilateral”.
El 26 de mayo del año pasado, Ansarolá liberó a 113 prisioneros. “Nos complace ver que se están dando prioridad a las consideraciones humanitarias, en particular para las familias que esperan ansiosamente el regreso de sus seres queridos, especialmente ahora que se acercan las celebraciones del Eid al-Adha en unas semanas”, mencionó Daphnee Maret, entonces jefa de la delegación del CICR en Yemen.
En abril de 2023, cerca de 900 prisioneros salieron en libertad después de charlas organizadas por la ONU entre el gobierno apoyado por Arabia Saudí y Ansarolá.
Entre los liberados estaban personas de gran importancia, como Naser Mansur Hadi, hermano del antiguo presidente yemení Abd Rabuh Mansur Hadi, y Mahmud al-Subeihi, exministro de Defensa del país.
Arabia Saudí comenzó la violenta guerra contra Yemen en marzo de 2015 junto con varios de sus amigos y con ayuda armamentista y logística de Estados Unidos y otros países de Occidente para restablecer al fugitivo exmandatario yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, que dejó la presidencia a finales de 2014 y luego escapó a Riad en el marco de un conflicto político con Ansarolá.
El propósito de la guerra también era detener al grupo Ansarolá, que ha estado manejando los asuntos del país sin un gobierno activo en Yemen.
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