Mediante un comunicado publicado el jueves, el Consejo Supremo yemení para Asuntos Humanitarios pidió a la comunidad internacional el fin de los crímenes de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) en la provincia de Marib, en el centro de Yemen, afirmando que “la coalición agresora y sus mercenarios están utilizando a civiles y personas desplazadas [en la zona] como escudo humano”.
El texto, citado por la cadena local Al Masirah, señaló que las fuerzas invasoras están intentando, de esta manera, retrasar el avance del Ejército y las fuerzas populares yemeníes y, como resultado, la liberación de la ciudad.
Asimismo, lamentó la medida y culpó a los mercenarios saudíes de poner en peligro la vida de los civiles y también causar las malas condiciones humanitarias derivadas en la región.
No obstante, enfatizó que el organismo está siguiendo de cerca la situación en Marib y está haciendo todos los preparativos necesarios para recibir a las familias desplazadas de la ciudad.
La nota del Consejo Supremo yemení fue emitida en momentos en que están en marcha feroces enfrentamientos entre el Ejército de Yemen y los mercenarios de Arabia Saudí y sus aliados en Marib, donde en los últimos meses, se han intensificado las operaciones de los yemeníes contra los agresores.
Ante los avances de las fuerzas yemeníes en Marib, Riad incluso ha recurrido a Estados Unidos y el Reino Unido para que intensifiquen sus llamadas al movimiento popular yemení Ansarolá y detengan su operación en dicha provincia.
En este sentido, el enviado especial de las Naciones Unidas para Yemen, Martin Griffiths, insistió el jueves a las fuerzas populares yemeníes que finalicen sus ataques en Marib.
A su vez, el presidente del Comité Supremo Revolucionario yemení, Mohamad Ali al-Houthi, le respondió en la red social Twitter, subrayando que la batalla para liberar Marib se está llevando a cabo para “neutralizar la implacable agresión de la coalición saudí y sus mercenarios”.
nkh/lvs/fmk/mkh
