Durante un acto celebrado el sábado, las autoridades de Yemen pusieron a disposición un nuevo vehículo blindado, denominado Baas 1, de fabricación nacional y de alta tecnología, para servir en diversas operaciones de seguridad, según anunció el ministro del Interior, Abdul Karim al-Houthi, en declaraciones hechas en la ceremonia.
Al-Houthi explicó que este logro se enmarca en la determinación de la nación yemení para impulsar la reconstrucción del país y protegerlo ante los enemigos.
Por su parte, Rizk al-Youfi, el viceministro del Interior, destacó los logros alcanzados en diversos campos, los cuales han facilitado el desafío a la agresión y el bloqueo saudíes, además de reafirmar la voluntad de las autoridades para continuar en el camino de la autosuficiencia.
Este vehículo se desvela, mientras Yemen está determinado, más que nunca, a reforzar su capacidad de combate, con el fin de confrontar la campaña de agresión, liderada por Arabia Saudí, y lanzar una batalla integral para liberar todos los territorios ocupados por los saudíes.
El Ejército yemení, que también dispone de tecnología avanzada en el campo de los misiles balísticos y drones, ha realizado decenas de ataques de represalia contra el régimen saudí y sus mercenarios, destruyendo sus centros estratégicos y militares.
De hecho, la industria militar de Yemen ha impuesto un equilibrio de poder en el campo de batalla con los agresores en momentos en que la dinastía gobernante de los Al Saud refleja una posición de debilidad, pues tras más de cinco años de guerra no ha podido materializar ninguno de sus objetivos, incluyendo restaurar en el poder al fugitivo expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, debido a la resistencia de los yemeníes.
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