En Santa Clara, capital de la provincia central de Villa Clara, los habitantes realizaron una masiva concentración, a lo que se unió el hecho de que las universidades celebraran acciones de solidaridad para condenar el imperialismo estadounidense y reiterar su voluntad de defender la Revolución Bolivariana.
“Defender a Venezuela es también resguardar a Cuba y a Latinoamérica, de ahí la disposición del pueblo cubano de dar hasta la vida por esa tierra tan solidaria con las causas justas del mundo”, declaró uno de los participantes.
Por otra parte, los trabajadores de la Empresa Siderúrgica José Martí, ubicada en el municipio del Cotorro, en la provincia de la Ciudad de La Habana, rechazaron las amenazas del Gobierno de Washington y los planes golpistas que pretenden romper el orden constitucional de Venezuela.
“Defender a Venezuela es defender nuestra Revolución, es defender el antimperialismo por el que lucharon Martí y Bolívar”, subrayó el líder sindical Leonel Sosa Mirabal.
En la provincia occidental de Pinar del Río, asimismo, cientos de jóvenes expresaron su apoyo al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y aseguraron que “la Patria de Simón Bolívar no está sola ante las amenazas del imperialismo”.
“Decir que Venezuela constituye una amenaza para los Estados Unidos es ridículo. Eso no lo concibe nadie. Es un argumento para tratar de derrocar la revolución”, declaró uno de los estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas de Pinar del Río.
La Habana, capital de Cuba, igualmente, fue escenario de una jornada de solidaridad a la que acudieron los médicos del Centro Internacional de Salud (CIS) La Pradera, quienes expresaron que el pueblo venezolano y el Gobierno no están solos.
Desde el pasado 9 de marzo, cuando el presidente de EE.UU., Barack Obama, ordenó una nueva tanda de sanciones contra funcionarios venezolanos y declaró a Caracas "una amenaza" para la seguridad nacional de EE.UU., las autoridades de diferentes países han repudiado enfáticamente la iniciativa estadounidense.
En la cumbre extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) celebrada el martes en Caracas, en la que participaron los presidentes de Cuba, Bolivia, Nicaragua y Venezuela, Raúl Castro, Evo Morales, Daniel Ortega y Nicolás Maduro, respectivamente, se condenó enérgicamente las acciones de EE.UU. contra el país bolivariano y sus integrantes demandaron la pronta derogación de esas medidas restrictivas.
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