Así lo reveló el miércoles la televisión israelí Canal 12, afirmando que Israel opera “numerosas células” en toda Siria con “armas presentes en casi todos los hogares” para ejecutar el complot.
El informe agregó que alrededor de 40 000 civiles sirios se encontraban actualmente en las zonas donde el régimen israelí intenta ejercer el control.
Tras la caída del gobierno del presidente Bashar al-Asad a finales de diciembre, el régimen sionista ha intensificado sus bombardeos contra posiciones militares sirias con el pretexto de evitar la propagación de la violencia del país levantino a los territorios palestinos ocupados.
Asimismo, Israel ha ampliado ilegalmente su control territorial al ocupar los altos del Golán y adueñarse de zonas desmilitarizadas de contención, violando flagrantemente el Acuerdo de Desconexión firmado en 1974 con Siria.
Las zonas ocupadas en los altos del Golán incluyen lugares estratégicos como el Monte Hermón, situado aproximadamente a 20 kilómetros (12 millas) de Damasco, la capital.
El Canal 12 afirmó en su informe que las nuevas ambiciones expansionistas de Israel en el sur de Siria tenían como objetivo garantizar que las zonas objetivo permanecieran desmilitarizadas y libres de “amenazas” para la entidad hebrea.
Esto ocurre mientras el gobierno de facto sirio, liderado por el grupo armado insurgente Hayat Tahrir al-Sham, ha declarado claramente que no busca ningún conflicto con Israel, a pesar de afirmar que el régimen sionista tiene que retirarse de las zonas ocupadas del país levantino.
El ministro israelí de asuntos militares, Israel Katz, declaró recientemente que las tropas israelíes permanecerán en Siria indefinidamente para lo que afirmó “proteger a las comunidades israelíes” e impedir la presunta transferencia de armas desde el país árabe a movimentos de Resistencia.
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