“EE.UU. está equipando la base [en el campo Al-Omar] para que sirva de sede de mando de las operaciones de la coalición internacional que lidera en Siria”, indican fuentes locales citadas anónimamente el martes por la cadena de televisión libanesa Al-Mayadeen.
Las tropas norteamericanas, según dichas fuentes, han desplegado importantes refuerzos logísticos en ese yacimiento petrolífero para fortificarlo, además han creado pistas de aterrizaje para helicópteros que tendrán como misión hacer patrullas de reconocimiento aéreo en los alrededores de los pozos.
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La base de Al-Omar sustituirá a la base de la provincia de Al-Raqa (norte), abandonada por los soldados estadounidenses en noviembre, agregaron.

Las fuentes denunciaron, asimismo, que EE.UU. trata de hallar un mecanismo para extraer la mayor cantidad de crudo sirio en el menor tiempo posible y está trasladando equipos eléctricos a fin de poner en funcionamiento la red de electricidad de los yacimientos petrolíferos para comenzar a explotarlos.
Desde que el presidente de EE.UU., Donald Trump, decidiera en noviembre abandonar varias posiciones en Siria y redesplegar tropas para “proteger” el petróleo sirio, varios convoyes militares norteamericanos han entrado ilegalmente en el país árabe desde el vecino Irak.
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En concreto, los soldados estadounidenses han abandonado 11 de sus bases en Siria y ahora se concentran en los pozos de petróleo de Remelan, en el noreste de la provincia nororiental de Al-Hasaka, y de Deir Ezzor.
Siria está inmersa desde 2011 en un conflicto armado provocado por grupos terroristas y bandas armadas patrocinados, según denuncia Damasco, por Arabia Saudí, EE.UU., y algunos países europeos. Los expertos estiman que la producción petrolera siria ha descendido en la actualidad de 400 000 barriles diarios a unos 80 000.
Los recursos naturales, sobre todo el petróleo y el gas, son fundamentales para la recuperación del país levantino tras el demoledor conflicto. En 2018, el presidente Bashar al-Asad estimaba que la reconstrucción podría costar a Siria unos 400 000 millones de dólares y que tardarían de 10 a 15 años en completar la tarea.
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