En una reunión mantenida este miércoles con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, en Moscú, capital rusa, Putin ha indicado que la implementación de la promesa de la Casa Blanca de evacuar Siria ayudará a la estabilización de la situación existente en el país, devastado por un conflicto armado que comenzó en 2011.
Si se implementa, ha agregado el mandatario ruso, la medida anunciada en diciembre por el presidente de EE.UU., Donald Trump, será “un paso positivo”.
Putin ha señalado, asimismo, que Moscú apoya el establecimiento de diálogos entre las autoridades del Gobierno de Damasco, presidido por Bashar al-Asad, y los representantes kurdos, en busca de encontrar una salida al conflicto.
La situación en la provincia de Idlib (noroeste de Siria) también fue abordada por los dos presidentes. Al respecto, Putin ha declarado que hablaron “en detalle” de la situación en Idlib.
Hemos coincidido en que debemos continuar juntos la lucha contra los terroristas, estén donde estén, incluida Idlib”, ha aseverado el presidente ruso, Vladimir Putin, en una cita mantenida con su par turco, Recep Tayyip Erdogan.
“Hemos coincidido en que debemos continuar juntos la lucha contra los terroristas, estén donde estén, incluida Idlib”, ha aseverado el presidente ruso.
Putin también ha anunciado que Moscú, en un futuro cercano, albergará una nueva cumbre trilateral entre Rusia, Turquía e Irán sobre el conflicto sirio.
Erdogan, por su parte, ha considerado como “piedra angular” la cooperación entre Ankara y Moscú para la paz y estabilidad en Siria, y ha anunciado que las partes buscan “fortalecer” la cooperación antiterrorista entre sí. Ambos países, ha añadido el mandatario turco, librarán “una guerra duradera” en Siria.
Erdogan no ha precisado los blancos de “la guerra duradera” en Siria, sin embargo, las fuerzas kurdas son consideradas terroristas por Ankara, cuya presencia en la batalla por Idlib ha añadido una nueva dimensión a un enfrentamiento en el que participarán todos los actores de esta larga y cruenta guerra.
En contraposición a la línea seguida por Ankara, los kurdos se sintieron decepcionados con EE.UU. tras el anuncio de la salida de Siria y temerosos por el hecho de que los dejen solos ante las operaciones turcas en territorio sirio, por lo que se dirigieron a Damasco para pedir protección.
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