“Las acciones de la Fuerza Aérea de Rusia permitieron dañar seriamente a los terroristas, sus infraestructuras, preservando el sistema estatal de Siria, lo que, en mi opinión, es el factor absolutamente clave”, ha afirmado este domingo el jefe de Estado ruso.
Durante una reunión informal con los líderes de BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) al margen de la cumbre del G20 en la ciudad china de Hangzhou (este), Putin también ha recalcado que la situación en Siria era particularmente peligrosa por la amenaza terrorista y Moscú no podía dejar sin respuesta la solicitud de ayuda de Damasco.
Las acciones de la Fuerza Aérea de Rusia permitieron dañar seriamente a los terroristas, sus infraestructuras, preservando el sistema estatal de Siria, lo que, en mi opinión, es el factor absolutamente clave”, ha dicho el presidente ruso, Vladimir Putin.
Rusia, que a partir de mediados de 2015 empezó, por petición del Gobierno sirio, a brindar apoyo militar a las fuerzas sirias en su lucha contra los grupos terroristas, entre ellos el grupo terrorista EIIL (Daesh en árabe) y otras bandas extremistas, ayudó a Damasco a recuperar el control de ciertas zonas en poder de los terroristas.
Desde hace más de un lustro, Siria vive sumida en un conflicto desencadenado por grupos armados y terroristas que intentan derrocar al Gobierno del presidente del país, Bashar al-Asad. Según estima el enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Siria, Staffan de Mistura, el conflicto ha dejado ya unos 400.000 muertos.
En esta línea, Putin ha hecho hincapié en que la solución definitiva para el conflicto en el país árabe puede lograrse solo a través de los medios políticos.
La respuesta real a la amenaza terrorista, ha proseguido el mandatario ruso, era posible solamente mediante la combinación de los esfuerzos de todas las partes interesadas en eliminar a los terroristas.
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