"Miren la situación de libertad de prensa (en Turquía). Es algo inadmisible para el mundo actual: incluso un intento de criticar, ironizar o satirizar es castigado con arrestos, amedrentamientos y expulsiones", lamentó la vocera de la Cancillería rusa.
En entrevista concedida al diario local Izvestia, Zajárova destacó que "ya las organizaciones internacionales que velan por la situación dicen que son inadmisibles las acciones de las autoridades turcas".
Miren la situación de libertad de prensa (en Turquía). Es algo inadmisible para el mundo actual: incluso un intento de criticar, ironizar o satirizar es castigado con arrestos, amedrentamientos y expulsiones", lamentó María Zajárova, portavoz oficial de la Cancillería rusa.
Las declaraciones de la portavoz rusa se produjeron pocos días después de que se revelara el despido de más de 400 periodistas de medios turcos opositores, Zaman y Cihan, durante los últimos meses, bajo órdenes de las autoridades gubernamentales.
Además de estos dos diarios mencionados, las televisiones Kanaltürk y Bugün TV, los diarios Bugün Gazetesi y Millet Gazetesi y la emisora Kanaltürk Radyo son los medios atacados y cerrados por el Gobierno de Ankara en los últimos meses.
De acuerdo con la portavoz oficial de la Cancillería rusa, los intentos de Ankara de "presionar e intimidar" se extienden incluso a los comunicadores fuera de Turquía.
En el mismo sentido, el 14 de abril fue bloqueada en Turquía la página web de la agencia rusa Sputnik, pocas horas después de la sesión de preguntas y respuestas con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, que en su comparecencia hizo varias declaraciones respecto a las autoridades turcas y las relaciones bilaterales. La actitud del Ejecutivo otomano fue repudiada por Amnistía Internacional (AI).
"Basta mencionar el 'colapso poético', cuando un satírico en Alemania recitó en la televisión un poema sarcástico sobre (el presidente turco Recep Tayyip) Erdogan y ahora enfrenta un juicio", aseveró Zajárova.
El cómico alemán Jan Böhmermann recitó el pasado 31 de marzo un poema –que él mismo calificó de un ejemplo de "críticas abusivas"– donde insinuó que Erdogan "la tiene pequeña" y le acusó de reprimir a las minorías kurda y cristiana, golpear a menores, etc.
El Gobierno de Turquía envió una nota a Berlín pidiendo iniciar una causa penal contra el presentador, mientras el propio Erdogan presentó una querella penal al respecto ante la Fiscalía de Maguncia.
Más tarde, la canciller alemana Angela Merkel aseguró que su Gabinete autorizará una investigación del caso Böhmermann pero a la vez afirmó que Alemania abolirá el artículo penal correspondiente –que tipifica como delito la injuria a organismos y representantes de Estados extranjeros– antes de 2018.
Böhmermann se enfrenta a una pena de prisión de hasta tres años si se demuestra que infringió el artículo 103 del código penal alemán.
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