El mensaje de "No al bombardeo en Siria" fue unísono entre los cientos de activistas reunidos a las puertas de las oficinas del primer ministro británico, David Cameron. La razón, la propuesta de Cameron de unirse a la coalición bélica contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) no tiene un plan concreto y creará más problemas que beneficios.
En su discurso, John Rees de la Organización “Alto a la Coalición Bélica”, describió la propuesta de bombardear como que otra acción de un Gobierno que actúa sin conexión con las demandas de su pueblo.
Otras de las razones para ponerse al ataque bélico es que acciones similares en Oriente Medio no han dado resultados, sin embargo, la propuesta será discutida la próxima semana en el Parlamento.
Los asistentes a esta concurrida manifestación esperan que sus voces de protesta hagan reflexionar a los parlamentarios para impedir que el premier lleve al Reino Unido a involucrarse en lo que sería el cuarto conflicto bélico en los últimos 14 años.
Claudia Navarro, Londres.
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