• Obama defiende su acción ejecutiva
Publicada: sábado, 23 de enero de 2016 5:01
Actualizada: sábado, 23 de enero de 2016 5:51

El futuro del alivio migratorio de millones de indocumentados en la Unión Americana está en manos del Tribunal Supremo.

Una porción de cal por las que van de arena. Es el dicho popular que podría describir las acciones de la administración del presidente de EE.UU., Barack Obama en sus últimos meses en la Casa Blanca.

Y es que si bien es cierto que durante su mandato se ofrecieron alivios migratorios, también es una realidad que Obama ha roto las marcas establecidas en el número de arrestos y deportaciones en la historia del país.

Hay quienes han seguido de cerca el trabajo de Obama y aseguran que no todos sus actos están en la lista negra. De hecho piensan que con la llegada de la acción ejecutiva a la corte suprema, se puede ver luz al final del túnel.

Un punto de vista que sin lugar a dudas no cae ni a la izquierda ni a la derecha, es el papel que debe jugar la comunidad hispana al momento de pedir que se active la acción ejecutiva o hasta una reforma migratoria.

Se prevé que el Tribunal Supremo realice audiencias en abril próximo sobre el caso y emita un dictamen definitivo para finales de junio próximo, justo en la mitad de las elecciones presidenciales.

Muchos le llaman el amigo de los inmigrantes por la creación de los alivios migratorios conocidos como DAPA y DACA. Otros lo describen  como su más cruel verdugo por tantas deportaciones que separaron  familias.

Lo cierto es que la acción ejecutiva que promete beneficiar a más de cinco millones de indocumentados, podría ser parte del legado que deje el primer presidente de color de los Estados Unidos.

Víctor Cordero, Los Ángeles

akm/msf