Amir Said Iravani catalogó estas agresiones como una violación del derecho internacional y de la soberanía de El Líbano, en una carta enviada el jueves al secretario general de la ONU, António Guterres, y al presidente del Consejo de Seguridad. La misiva se publicó después de los asesinatos selectivos de una madre iraní de cinco hijos y de un médico en Beirut por parte de Israel.
“El 19 de octubre de 2024, un dron israelí lanzó un ataque con misiles contra el vehículo personal de una ciudadana iraní, la Sra. Masume Karbasi, y su esposo libanés, en la zona densamente poblada de Jounieh, Beirut. Después de escapar por poco del primer misil, la pareja buscó refugio al costado de la calle, pero momentos después fue alcanzada por un segundo misil, lo que resultó en su martirio”, escribió Iravani.
“Este brutal ataque, captado por cámaras de vigilancia y difundido por los medios de comunicación, revela el flagrante desprecio por la vida civil y las normas jurídicas internacionales”, añadió.
Iravani describió los asesinatos como un descarado acto de violencia y terrorismo perpetrado por el régimen. “Los ataques también revelan el flagrante desprecio de Israel por la vida civil y las normas jurídicas internacionales, incluidas las Convenciones de Ginebra de 1949”, dijo.
“En otro crimen atroz, el 22 de octubre de 2024, en un ataque atroz y deliberado, Israel asesinó al Dr. Ali Heidari, médico y trabajador humanitario iraní, en Beirut. El Dr. Heidari estaba cumpliendo funciones vitales, brindando atención médica crítica a los heridos y ayudando a quienes la necesitaban con urgencia”, afirmó.
“Su asesinato no es solo un acto de violencia despreciable, sino también una flagrante violación de las Convenciones de Ginebra de 1949, que prohíben expresamente los ataques a hospitales y personal médico. Esto constituye un crimen de guerra según el derecho internacional”, escribió.
Iravani subrayó que el régimen debe rendir cuentas plenamente por sus continuas violaciones de la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional.
Desde octubre de 2023, los ataques de Israel contra El Líbano han dejado más de 2500 personas muertas y otras 11 862 heridas, informó el Ministerio de Salud libanés. De la cifra total de fallecimientos, 1552 ocurrieron desde el 23 de septiembre, cuando Israel intensificó sus bombardeos contra el país árabe.
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