El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Esmail Baqai, ha denunciado este domingo que los recientes ataques del régimen israelí con armas donadas por Estados Unidos contra los lugares sagrados, escuelas, mezquitas y centros médicos en Palestina y El Líbano recuerdan a la opinión pública los crímenes del grupo terrorista Daesh.
Ha subrayado que la matanza de los civiles y la destrucción de las infraestructuras son parte inseparable de las ideas del sionismo y la excomunión.
“La continuación de la política de terror y matanzas masivas contra la oprimida nación palestina, que ha sido desplazada de sus hogares y se ha refugiado en lugares de culto y centros culturales y médicos, es un claro ejemplo de crimen de guerra y de crimen contra la humanidad, y es conveniente que la comunidad mundial enfrente con seriedad y eficacia al ‘Hitler’ de la nueva era, es decir Netanyahu y los líderes criminales del régimen sionista”, ha reclamado.
El diplomático iraní ha alertado que la política que sigue el régimen para perturbar la seguridad de la región es una grave amenaza a la paz y la estabilidad regional e internacional, y que la inacción contra estos crímenes tendrá consecuencias irreparables para todos los países de la región y más allá.
“La República Islámica de Irán pide una vez más a todos los países del mundo, especialmente a los musulmanes, que envíen ayuda humanitaria inmediata a las personas sin hogar y desplazadas en Gaza y El Líbano de todas las formas posibles y utilizando las enormes capacidades que tienen para contrarrestar la política de terror e inseguridad de la región que persigue el régimen sionista”, ha apostillado.
Al menos 21 personas perdieron la vida y decenas más resultaron heridas en un bombardeo que el régimen israelí llevó a cabo este domingo contra una mezquita convertida en refugio en Deir al-Balah, una localidad ubicada en el centro de la Franja de Gaza.
La agresión israelí desde el 7 de octubre ha dejado 41 825 palestinos muertos y otros 96 910 heridos en Gaza. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
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