“Como hemos subrayado antes, las tres islas Bu Musa, Tonb Mayor y Tonb Menor en el Golfo Pérsico son parte inseparable y eterno del suelo iraní”, aseveró el portavoz de la Cancillería iraní, Naser Kanani el miércoles, añadiendo que las reiteradas reclamaciones sobre las islas iraníes carecen de valor político y legal, y se consideran como “intromisión” en los asuntos internos de Irán.
De este modo, reaccionó a una declaración emitida por el presidente de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y el emir de Kuwait un día antes al final de la visita de este último a Abu Dabi (la capital emiratí). La declaración redunda en las querellas de los Emiratos sobre las tres islas iraníes y los reclamos de Kuwait sobre el campo de gas de Arash.
Kanani desestimó la declaración y describió partes de su contenido como “injerencistas”.
“La República Islámica de Irán nunca considerará negociable su integridad territorial”, subrayó.
Irán ha aportado documentos históricos que demuestran que dichas islas son parte de su territorio desde el siglo XVIII. Sin embargo, los Emiratos han reclamado las islas insistentemente.
Sobre los reclamos de Kuwait sobre el campo de gas de Arash, el portavoz iraní dejó claro que Irán ha indicado “repetidamente que hacer reclamos unilaterales en tales declaraciones no crea un derecho para el reclamante”.
Las negociaciones técnicas y jurídicas que han tenido lugar anteriormente entre Irán y Kuwait son el mejor y más adecuado camino para abordar esta cuestión, añadió Kanani, anunciando la disposición de Irán a continuar esas negociaciones dentro de un marco que garantice el respeto de los intereses comunes.
“La República Islámica de Irán cree que sólo se puede lograr un acuerdo justo sobre el campo de Arash creando un entorno positivo y constructivo y defendiendo los derechos e intereses comunes”, puntualizó.
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