“Recientemente, se ofreció un paquete por valor de 40 000 millones de dólares para la inversión china en la industria petrolera de Irán, que se centra en proyectos de cadena de valor, especialmente la petro-refinería Shahid Soleimani”, dijo el jueves en una entrevista con la televisión estatal, el adjunto del Ministerio de Petróleo iraní para asuntos internacionales, Ahmad Asadzade.
Asadzade dio a conocer que la parte china quiere cooperar con la República Islámica “a pesar de las opresivas sanciones estadounidenses”. Detalló que la mayor parte de los proyectos ofrecidos a China estarán en el sector costero de la industria iraní de petróleo y gas.
También dijo que, además de los proyectos de inversión, Irán busca otro paquete financiero de 20 000 millones de dólares de China para acelerar el desarrollo del sector petrolero, y que este paquete se sumará al anterior de 20 000 millones que permitió acceder a los fondos necesarios para construir cinco plantas petroquímicas.
En presencia de los presidentes de Irán y China, Seyed Ebrahim Raisi y Xi Jinping, respectivamente, se firmaron el martes 20 documentos de cooperación entre los dos aliados asiáticos en una ceremonia celebrada en Pekín.
Según lo acordado, Teherán y Pekín se comprometen a mejorar la cooperación bilateral en diferentes sectores, incluidos la gestión de crisis, el turismo, la tecnología de la información y las comunicaciones, el medio ambiente, el comercio internacional, la propiedad intelectual, la agricultura, las exportaciones, la atención médica, los medios de comunicación, los deportes y el patrimonio cultural.
Xi, uno de los críticos del unilateralismo que impulsa EE.UU. en el mundo, expresó el mismo martes su apoyo a Irán “en la protección de la soberanía nacional” y “en la resistencia contra el unilateralismo y la agresión”.
De hecho, tanto China como Irán han desafiado siempre las sanciones estadounidenses, impulsando sus cooperaciones económicas bilaterales.
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