Esta medida de las empresas estadounidenses se llevó a cabo sin previo aviso ni objeción, a pesar de que el canal iraní en árabe tenía cuentas verificadas en estas plataformas.
Además, el contenido del canal fue eliminado de Google Noticias, en contravención a la práctica habitual de enviar una advertencia y ofrecer la posibilidad de objeción por correo electrónico.
Todo esto ocurre en un momento en el que el canal está cubriendo la agresión israelí contra la Franja de Gaza y el genocidio en curso contra la población palestina en el enclave.
No es la primera vez que las cuentas del canal Al-Alam son restringidas en las redes sociales: en 2020, Facebook eliminó la página verificada del canal en Instagram, al igual que Twitter, a pesar de que la página era seguida en ese momento por cientos de miles de activistas.
Meses después, Facebook eliminó la página de Al-Alam, que era seguida por más de siete millones de personas en todo el mundo.
El canal ha denunciado el bloqueo en su sitio web, aseverando que es verdaderamente lamentable que la libertad de los medios de comunicación sea confiscada por quienes reivindican la democracia y la libertad de prensa, a la vista del mundo entero, sin que la comunidad internacional tome medidas al respecto.
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