La portavoz de la Policía Nacional de Nicaragua, la comisionada mayor Vilma Rosa González, informó de los distintos hechos de violencia en las manifestaciones y reportó la muerte del referido funcionario, quien laboraba en el Instituto Nacional Tecnológico. Palacios murió a causa de un balazo que recibió el pasado 25 de mayo por personas desconocidas.
González también señaló que dos personas resultaron heridas el domingo, 27 de mayo, tras la explosión de un vehículo que trasladaba proyectiles de mortero. El suceso tuvo lugar cerca del aeropuerto Augusto C. Sandino, localizado en Managua (la capital).
Por su parte, la Policía nicaragüense enfatizó en un comunicado que no han actuado en ningún punto de la capital, rechazando así las alegaciones de las autoridades de la Universidad Centroamericana (UCA) sobre un ataque a morterazos por los “parapoliciales encapuchados”.
“La Policía Nacional no ha tenido, no tiene, ni tendrá fuerzas parapoliciales, y no ha actuado contra esos grupos delincuenciales por existir acuerdos en el Diálogo Nacional de mantener acuarteladas las fuerzas policiales, garantizando el desarrollo de marchas pacíficas en el territorio nacional”, aseveró.
Las movilizaciones en Nicaragua han provocado daños en la propiedad pública y privada, secuestros, incendios de vehículos, interrupción de energía en varias zonas, entre otros.
La Policía Nacional no ha tenido, no tiene, ni tendrá fuerzas parapoliciales, y no ha actuado contra esos grupos delincuenciales por existir acuerdos en el Diálogo Nacional de mantener acuarteladas las fuerzas policiales, garantizando el desarrollo de marchas pacíficas en el territorio nacional”, reza el comunicado de la Policía de Nicaragua en alusión a las más recientes protestas en el país, en una de las cuales murió Jorge Gastón Palacios, trabajador del Instituto Nacional Tecnológico.
“Nuestra institución Policial hace un llamado a respetar la vida y la integridad física de las personas, propiedad pública y privada, el derecho a circular libremente en todo el territorio nacional y reitera su compromiso de continuar trabajando por la paz, la seguridad y la tranquilidad de las personas, familias y comunidades”, reza el comunicado de la Policía en el que se reitera la posición del Gobierno de Nicaragua ante estos actos violentos.
El 18 de abril estallaron las protesta en el país en contra de la polémica reforma del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS), aprobada dos días antes con el objetivo de incrementar la contribución de empresas y trabajadores, así como reducir en un 5 % las pensiones.
Nicaragua es blanco de las tensiones, mientras que la mesa de diálogo nacional suspendió el 23 de mayo sus sesiones suplementarias por la falta de consenso entre el presidente del país, Daniel Ortega y la oposición.
A su vez, el Gobierno de Managua sigue anunciando su disposición para dialogar y pide frenar la violencia entre los "hermanos” nicaragüenses. Varias organizaciones informan de unos 76 muertos y 868 heridos en los enfrentamientos.
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