Según informó el domingo el diario South China Morning Post, los recientes gestos de apoyo a Taiwán indican que Japón y Estados Unidos han estado discutiendo el escenario de un posible conflicto entre la isla y China, además, están haciendo planes para disuadir a Pekín de usar la fuerza para tomar la isla.
“Japón no solo ha emitido señales a través de niveles oficiales e individuales, sino que también ha intentado llevar a cabo acciones prácticas de respuesta a través de la alianza Japón-Estados Unidos o ha actuado parcialmente en solitario bajo el marco legal existente”, señaló un artículo de la revista Asia- Seguridad y Asuntos Marítimos del Pacífico, citado por el medio.
Al remarcar que es difícil imaginar que en el futuro a corto y mediano plazo Japón buscará activamente involucrarse en una guerra desastrosa incontrolable sin importar el costo, agregó el texto que es más probable brindar apoyo logístico a sus aliados en el lugar de involucrarse directamente en el combate.
A pesar de que la Constitución japonesa renuncia al derecho a hacer la guerra y su pueblo puede ser reacio a involucrarse en un conflicto, subrayó, había al menos tres escenarios en los que una ley de seguridad nacional de 2015 autorizó a las Fuerzas de Autodefensa de Japón a implicar, ya sea proporcionando apoyo logístico a EE.UU., invocando una cláusula de “defensa colectiva” para unirse a Washington en la defensa de la isla o las bases estadounidenses en Japón sean atacadas.
Ante tal situación, la pregunta no es “si” Japón intervendrá en la referida guerra, sino simplemente “cómo” lo hará, agregó.
En los últimos años, las Armadas de Japón y Estados Unidos realizaron una serie de ejercicios conjuntos y llevaron a cabo en este mes su primer simulacro antisubmarino conjunto en el mar de la China Meridional.
Mientras tanto, Taiwán es un tema muy sensible para China, pues considera a la isla como parte integrante de su territorio. Asimismo, el gigante asiático repudia cualquier actividad separatista en Taipéi que, en los últimos tiempos, cuenta con apoyo explícito de Washington y no descarta recurrir al uso de la fuerza para reunificar dicho territorio.
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