El portavoz de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Behruz Kamalvandi, en una entrevista exclusiva publicada este viernes por la cadena Press TV, ha criticado que la AIEA publica informes confidenciales sobre las actividades nucleares de Irán, antes de que se completen las investigaciones, con el fin de allanar el terreno para lanzar una campaña de propagandas contra el programa pacífico de energía atómica del país.
“El volumen y el alcance de la presión propagandística contra el país y el Gobierno claramente tienen fines políticos”, ha dicho.
“Cuando dicen presión máxima, se refieren a presión por cualquier medio. A veces usan la economía, a veces la política o temas relacionados con la AIEA, a veces son los derechos humanos, otras veces el terrorismo y muchas otras excusas que se esgrimen de vez en cuando. Siempre que es necesario y no pueden usar sus viejos pretextos, fabrican un problema contra Irán”, ha denunciado.
Descartando los comentarios de la agencia, el vocero ha explicado que Irán solo ha cambiado la forma de enriquecimiento, no el cuestionario de información de diseño (DIQ, por sus siglas en inglés), como alegó la AIEA.
Al respecto, ha señalado que Irán informó al organismo sobre el error que cometió su inspector, por lo que se realizó otra inspección y se confirmó que Irán no había realizado ningún cambio en el DIQ, pero la reacción de la Agencia fue deliberada y presentó un informe en contra del país persa, e inmediatamente, los tres países europeos y Estados Unidos emitieron un proyecto de resolución antiraní, que posteriormente fue aprobado. “Cuando se emite una declaración contra Irán a esta velocidad, muestra que la acción tomada fue premeditada”, ha asegurado.
Kamalvandi ha rechazado también las acusaciones de que Irán busca producir uranio altamente enriquecido, afirmando que, si lo decide, va a anunciarlo a la Agencia. El funcionario criticó a la AIEA por permitir que las comunicaciones entre Teherán y el organismo se filtraran a la prensa, declarando a la Agencia “100 por ciento culpable” en el caso.
“Hubo una carta confidencial entre nosotros y la Agencia, se planteó una pregunta y respondimos. Las preguntas se difunden en los medios, pero nuestra respuesta no. (…) El objetivo es crear un espacio para aquellos que quieren acusar a Irán de violar su compromiso y no respetar los Acuerdos de Salvaguardias”, ha agregado.
Tras haber enfatizado que Irán todavía “ha cumplido” consistentemente con el acuerdo, y que 15 informes de la Agencia lo aprueban, Kamalvandi ha remarcado que “no hay una razón lógica para la acción de la agencia y hay un propósito político detrás para distorsionar la imagen de la República Islámica de Irán”.
La Junta de Gobernadores de la AIEA aprobó en 2022 dos resoluciones (en octubre y noviembre), pidiendo a Irán que explique a la Agencia sobre los supuestos “rastros de uranio encontrados en tres sitios no declarados”.
Irán ha rechazado la existencia de dichos sitios e insiste que la AIEA debe cerrar de una vez por todas este expediente inventado, en el que ve las huellas de Israel.
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