El relator especial de la ONU sobre la promoción y protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra el terrorismo, Ben Saul, ha señalado este miércoles que los ataques perpetrados contra El Líbano por parte del ejército israelí sentarían un precedente peligroso para otros conflictos globales.
“Al escalar el conflicto en El Líbano, Israel está claramente violando el derecho internacional, violando la soberanía de El Líbano y violando la prohibición del uso de la fuerza estipulada en la Carta de la ONU”, ha afirmado en una entrevista concedida a la cadena catarí Al Jazeera.
Al respecto, ha agregado que esto debería ser motivo de preocupación para el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y todos los Estados deberían aconsejar a Israel que no intensifique el conflicto.
Soul ha acentuado que la operación sorpresa Tormenta de Al-Aqsa, lanzada por el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), no tiene nada que ver con El Líbano, pues Israel no puede justificar la extensión de los conflictos hacia la frontera libanesa.
“El ataque original de HAMAS contra Israel el 7 de octubre provino de Gaza, no de El Líbano. E Israel no ha presentado ninguna prueba de que HAMAS estuviera atacando a Israel desde el territorio de El Líbano”, ha resaltado.
Israel libró la guerra en Gaza el 7 de octubre, tras sufrir una derrota sin precedentes en la operación Tormenta de Al-Aqsa, lanzada por HAMAS en respuesta a décadas de crímenes del régimen contra los palestinos. Hasta el momento, Israel ha matado al menos a 23 210 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, mientras decenas miles de personas se encuentran heridos o desaparecidos.
El ejército israelí también ha estado llevando a cabo ataques contra el territorio libanés desde entonces, lo que provocó ataques de represalia por parte del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá).
Los ataques israelíes han acabado con la vida de varios combatientes de Hezbolá. Además, ha comenzado a atacar a los comandantes y líderes de HAMAS en el suelo libanés, que causó el 2 de enero el asesinato del jefe adjunto del Buró Político de HAMAS, Saleh al-Aruri.
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