“Las fuerzas de la resistencia actualmente cuentan con gran capacidad y poder y unos misiles capaces de alcanzar cualquier objetivo israelí”, ha señalado Nasrolá en un discurso con motivo del 22º aniversario del bombardeo de la población libanesa de Qana en 1996 por el régimen de Israel.
Nasrolá también ha destacado el papel de Hezbolá a la hora de asegurar las fronteras del sur de El Líbano, ante la inacción del Gobierno libanés.
En El Líbano estos días se recuerda la masacre del régimen de Israel en Qana. Era 1996 y el régimen de Tel Aviv bombardeó un refugio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con cientos de civiles dentro. El ataque contra Qana formaba parte de la operación militar “Uvas de la ira” contra El Líbano.
Las fuerzas de la resistencia actualmente cuentan con gran capacidad y poder y unos misiles capaces de alcanzar cualquier objetivo israelí”, advierte el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá.
En este ataque asesinaron a 106 libaneses, incluidos niños y mujeres. Otras 116 personas resultaron heridas: cuatro cascos azules de las Naciones Unidas, entre ellas.
Después de la última guerra israelí contra El Líbano en el año 2006, la capacidad disuasiva de Hezbolá se ha incrementado exponencialmente Los responsables de Hezbolá insisten una y otra vez en su disposición a defender la soberanía de El Líbano.
Varios analistas ya han indicado que Hezbolá cuenta con un gran número de misiles y cohetes con capacidad para golpear todos los territorios ocupados por Israel.
De hecho, un alto funcionario israelí afirmó en febrero que Hezbolá, entre 2006 y 2012, se había equipado con 130 000 misiles, lo que, a su juicio, representa un “fracaso estratégico” para el régimen de Tel Aviv.
tqi/rba/nii/