Se sabía del informe desde 2018. Sus filtraciones a la prensa confirmaban que el brutal asesinato del periodista saudí Yamal Khashoggi en el consulado saudí en Turquía, fue aprobado y ordenado por el príncipe heredero, Mohamed Bin Salman.
En ese entonces, La administración del expresidente de EE.UU. Donald Trump rechazó publicar su versión desclasificada, centrándose en cambio en una mejor cooperación con los saudíes. Sin embargo, el nuevo inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, quiere que el reporte y sus conclusiones no sean más un secreto.
Esto como parte de su estrategia de revisar los lazos con el reino saudí. La decisión de Estados Unidos es saludada por la relatora de las Naciones Unidas sobre las ejecuciones extrajudiciales, Agnes Callamrd, quien la calificó de un paso en la dirección correcta para hacer justicia por el columnista de Washington Post.
La nueva administración ya ha realizado algunos cambios de política importantes con respecto a Riad, como poniendo fin al apoyo de Estados Unidos a las operaciones ofensivas de Arabia Saudí en Yemen.
Sin embargo, muchos, como Briyan Fogel, quien dirigió un documental sobre el asesinato de Khashoggi esperan que el alcance de las reformas sea mayor.
Este miércoles por la noche, se supo que Mohammed Bin Salman fue operado por una apendicitis. Una cirugía que curiosamente llega en buenos momentos para ayudar al príncipe de apartarse un poco de las críticas.
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