Las palabras de Trump han provocado una lluvia de críticas y descontento en todo Estados Unidos.
No es la primera vez que el presidente Trump hace comentarios polémicos cuando intenta ser un experto en erradicar coronavirus. La más dura crítica fue cuando recientemente sugirió que los pacientes con COVID-19 se inyectaran desinfectantes o rayos ultravioleta para matar el virus, aunque poco después del escándalo se retractó. Lo cierto es que el centro de control de envenenamiento de Nueva York recibió más de cien llamadas por incidentes con productos desinfectantes.
Trump volvió a encender los focos de alerta cuando dijo los medios que desde hace una semana y media toma de forma diaria hidroxicloriquina como prevención al COVID-19 Este fármaco no está aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos.
La compañía Reckitt Benckiser, responsable del desinfectante Lysol, uno de los más empleados en Estados Unidos, avisó de que este producto no está hecho para el consumo humano en respuesta a las declaraciones de Trump.
Médicos y funcionarios de estados unidos han dicho las imprudencias del presidente son peligrosas e irresponsables y solo se debe hacer caso a los expertos en salud.
Rosie Orbach, Los Ángeles (California).
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