Un informe del diario estadounidense The New York Times, revelado este lunes, ha puesto de relieve que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presionó al primer ministro de Australia, Scott Morrison, con el fin de conseguir información que desacredite la investigación del exfiscal especial Robert Mueller sobre la supuesta interferencia rusa en elecciones presidenciales del 2016 del país norteamericano.
Según dos funcionarios estadounidenses con conocimiento del tema, Trump realizó una llamada telefónica a Morrison para pedirle que ayudara al fiscal general de los Estados Unidos, William Barr, a encontrar evidencia para una revisión de la investigación de Mueller.
“La Casa Blanca restringió el acceso a la transcripción de la llamada a un pequeño grupo de asistentes”, avanza el diario para luego afirmar que el hecho revelado demuestra “la medida en que Trump ve la investigación del Departamento de Justicia como una forma potencial de obtener influencia sobre los aliados más cercanos de Estados Unidos”.
A raíz de la trama rusa, en julio del 2017 y tan solo unos meses después de que Trump ganó los comicios, se realizó el primer intento para obligar al mandatario a abandonar el cargo a través de un juicio político (impeachment) en su contra.
LEER MÁS: Hillary Clinton dice que Rusia sí interfirió en Presidenciales 2016
LEER MÁS: Rusia vuelve a negar cualquier injerencia en elecciones de EE.UU.
La Casa Blanca restringió el acceso a la transcripción de la llamada a un pequeño grupo de asistentes”, afirma el diario estadounidense The New York Times sobre una llamada telefónica mantenida entre el presidente de EE.UU., Donald Trump, y el primer ministro de Australia, Scott Morrison.
Esta revelación sale a la luz en momentos en que la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, tiene abierta una investigación formal de juicio político contra el magnate republicano en base a su llamada telefónica, revelada también recientemente, con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, para que este investigue al hijo de Joseph Biden, su rival demócrata en las elecciones presidenciales de 2020.
LEER MÁS: ‘216 legisladores estadounidenses apoyan impeachment contra Trump’
Una vez concluida la investigación en marcha, la Cámara de Representantes deberá votar si actúa contra Trump. En caso de votar a favor, pasaría al Senado, de mayoría republicana, y allí debería contar con la aprobación de al menos 20 republicanos para finalmente proceder al juicio político contra el mandatario estadounidense.
“Al igual que esa llamada (con Zelenski), la discusión de Trump con el primer ministro de Australia, Scott Morrison, muestra que el presidente utiliza la diplomacia de alto nivel para promover sus intereses políticos personales”, resalta al respecto el rotativo neoyorquino.
mtk/lvs/hnb