Se trata de Steve Goldstein, subsecretario de Diplomacia y Asuntos Públicos del Departamento de Estado, quien esta misma jornada había indicado que Tillerson tenía toda la intención de quedarse en su puesto, que su jefe “desconocía la razón” de su reemplazo y que el mandatario ni siquiera le había informado en persona del despido.
La Casa Blanca llamó a Goldstein para decirle que estaba despedido y después ha sido requerido por la oficina de Tillerson para una reunión. El funcionario, que llevaba en el cargo menos de tres meses, se había convertido, en gran medida, en el portavoz de Tillerson y fue confirmado unánimemente por el Senado el año pasado.
También era conocido por ser leal a Tillerson, a quien animó a hablar más con la prensa. Goldstein asistió a muchas reuniones en la Casa Blanca y constantemente declaraba que Tillerson iba a devolver el poder de toma de decisiones sobre la política exterior al Departamento de Estado.
Statement from Under Secretary of State Steve Goldstein: The Secretary had every intention of remaining because of the tangible progress made on critical national security issues. He established and enjoyed relationships with his counterparts.
— Steve Goldstein (@UnderSecPD) March 13, 2018
Después de meses de tensiones entre el mandatario estadounidense y su secretario de Estado, Trump ha destituido esta jornada a Tillerson y ha anunciado que propondrá al director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), Mike Pompeo, para reemplazarlo, orquestando así un gran cambio en su equipo de seguridad nacional.
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