El ministro de Defensa de Irán, el general de brigada Amir Hatami, señaló el miércoles que los enemigos siempre han puesto “ojos codiciosos” sobre Irán debido a su posición estratégica en la región de Asia Occidental, sus vías fluviales, así como sus ricos recursos de petróleo, gas y energía.
“Esto demuestra que siempre debemos enfocarnos en nuestro poder defensivo y aumentar nuestra autoridad nacional”, subrayó Hatami, en una reunión mantenida con altos comandantes del Ejército y del Cuerpo de Guardias de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán en la provincia nororiental de Jorasán Razavi.
El alto mando castrense iraní destacó, además, que a pesar de las injustas y crueles sanciones impuestas contra Irán, el país disfruta de una seguridad sostenible y duradera.
Tras alabar la estrecha interacción entre las Fuerzas Armadas del país, Hatami ha recalcado que tales cooperaciones han convertido a estas fuerzas en una potencia única en el ámbito internacional.
La Defensa Sagrada de Irán durante la guerra impuesta por el entonces régimen de Irak a Irán (1980-1988) demostró a la arrogancia mundial que la República Islámica no solo repelerá a un agresor, sino que también lo perseguirá y castigará, agregó.
A pesar de estar sometido en los últimos 40 años a severas sanciones de EE.UU. y el Occidente, Irán se ha desempeñado de manera “deseable y aceptable” en el ámbito defensivo y ahora es una de las más importantes potencias en la construcción de misiles y aviones, así como en la fabricación de numerosos equipos y sistemas militares.
Entretanto, las autoridades iraníes han aclarado una y otra vez que la capacidad militar del país no representa amenaza alguna para otros, si bien han alertado que la República Islámica siempre estará lista para defenderse.
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