El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, cargó contra su predecesor, el ultraderechista Jair Bolsonaro, por buscar aferrarse al poder, mientras la policía lanza una operación contra Bolsonaro y su círculo por el intento de golpe de Estado.
En Brasil, el presidente Lula Da Silva afirmó que el intento de Golpe de Estado de 2023 en su contra no hubiera ocurrido sin el expresidente, el ultraderechista Jair Bolsonaro, quien, según Lula, no estaba preparado para reconocer su derrota electoral de 2022 y dejar el poder de manera pacífica.
Entretanto, la Policía Federal anunció el mismo jueves haber lanzado una operación contra aliados muy próximos al expresidente. La Policía Federal cumplió 33 órdenes de registro y 4 de prisión preventiva en una decena de estados brasileños contra la trama golpista, que buscó, antes y después de las elecciones de 2022, mantener en el poder a Bolsonaro.
Por su parte, Bolsonaro ha rechazado los cargos en su contra, y dice estar siendo objeto de una persecución.
Bolsonaro, está inhabilitado por la corte electoral para participar en comicios durante ocho años. El exmandatario ya entregó el mismo jueves su pasaporte a las autoridades en el marco de las investigaciones sobre la trama golpista.
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