En un comunicado, la Cancillería venezolana expresó el jueves que con el veto brasileño se está “reproduciendo el odio, la exclusión e intolerancia promovidos desde los centros de poder occidentales para impedir, por ahora, el ingreso de la patria de Bolívar a esta organización”.
Esto es “una acción que constituye una agresión a Venezuela y un gesto hostil que se suma a la política criminal de sanciones que han sido impuestas contra un pueblo valiente y revolucionario. Ninguna artimaña o maniobra concebidas contra Venezuela detendrán el curso de la historia”, señala el escrito publicado por el canciller venezolano, Yvan Gil’.
De igual forma, el Ejecutivo de Nicolás Maduro aseguró que contaba con “el respaldo y apoyo de los países participantes en esta para la formalización de su ingreso a este mecanismo de integración”.
Pero —prosigue el texto–-, “a través de una acción que contradice la naturaleza y postulados de los BRICS, la representación de la Cancillería brasileña decidió mantener el veto que (el expresidente de Brasil Jair) Bolsonaro (2019-2022) aplicó a Venezuela durante años”.
“El pueblo venezolano siente indignación y vergüenza por esta agresión inexplicable e inmoral de la Cancillería brasileña”, añade el escrito.
Siguen las reacciones por la negativa de Brasil de no dejar ingresar a Venezuela en los BRICS.
— Madelein Garcia (@madeleintlSUR) October 24, 2024
El diputado opositor Luis Brito:
“Lula tendrá que explicarle mucho al concierto de los países de Latinoamérica”.
“Su comportamiento tributa al hegemon y la política de chantaje con… pic.twitter.com/kEGxhCiH7X
Por su parte, el diputado opositor venezolano José Brito, en referencia a la negativa del gobierno de Brasil de no dejar ingresar a Venezuela al bloque de economías emergentes, señaló que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva “tendrá que explicarle mucho al concierto de los países de Latinoamérica”.
El martes, se informó que Brasil vetó informalmente la admisión de Venezuela como ‘país socio de los BRICS’, la nueva categoría de asociación que es la gran novedad de la 16ª reunión del grupo en Kazán.
El excanciller y asesor del Gobierno brasileño Celso Amorín había adelantado que, aunque no hay enemistad con el gobierno de Maduro, el país atraviesa una situación que dificulta su aceptación en el grupo, por lo que el Gobierno de Lula da Silva no impulsaría el ingreso de Venezuela a los BRICS, fundado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica y ampliado a principios de este año con el ingreso de Egipto, Etiopía, Irán y los Emiratos Árabes Unidos.
Venezuela y Brasil se han distanciado desde las elecciones de 28 de julio, en las que las autoridades electorales venezolanas proclamaron la victoria de Maduro, sin embargo, la oposición, con el apoyo de países extranjeros, han cuestionado el resultado.
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