En una declaración leída este miércoles por su presidente, Maikel Moreno, el TSJ ha cargado contra Pence por amenazar el martes con sancionar a los magistrados de este ente si no se oponen al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
“De una manera infame y extorsiva (Pence) propone a los legítimos y altos administradores de justicia (...) ponerse al margen de la Constitución (...) con el fin de colocar a la nación al servicio de los intereses imperiales del Gobierno guerrerista de la Casa Blanca”, ha lamentado Moreno.
Este ultimátum, ha asegurado el máximo representante del órgano judicial, pone de relieve la pretensión de Washington de que el Poder Judicial del país sudamericano se ponga al margen de la democracia y “propicie un golpe de Estado”.
De una manera infame y extorsiva (el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence) propone a los legítimos y altos administradores de justicia (...) ponerse al margen de la Constitución (...) con el fin de colocar a la nación al servicio de los intereses imperiales del Gobierno guerrerista de la Casa Blanca”, ha lamentado el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, Maikel Moreno.
La nota resalta, además, que los magistrados del TSJ no son “chantajeables” ni se subordinan nunca ante un gobierno extranjero que pretenda “burlar la soberanía” de Venezuela.
El vicepresidente estadounidense levantó las sanciones económicas contra un general venezolano que se volvió en contra de Maduro y amenazó con imponer sanciones similares a los 25 miembros del máximo tribunal de justicia, ya que tal órgano, a su juicio, se convirtió en “una herramienta política” de Caracas.
A continuación, Moreno ha instado a los funcionarios estadounidenses a abandonar su política injerencista, así como a cesar las sanciones que ha impuesto la Casa Blanca contra el país caribeño.
El mismo día del anuncio de Pence, el TSJ ordenó que se enjuiciara a siete diputados opositores de la Asamblea Nacional (AN) venezolana por traición a la patria y conspiración, tras su participación en el intento de golpe de Estado del pasado 30 de abril, liderado por el jefe de la AN, el líder opositor Juan Guaidó, y apoyado por Washington.
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