El general de brigada Esmail Qaani, el comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), comentó este domingo que el alto el fuego, que entró en vigor el día de hoy y puso fin a la agresión israelí contra los palestinos en la asediada Franja de Gaza, es la “mayor derrota” que el régimen de Tel Aviv había experimentado en su “miserable vida”, ya que no logró alcanzar ninguno de sus objetivos.
“Los carniceros sedientos de sangre y asesinos de niños del régimen sionista, después de 15 meses de crímenes desenfrenados cometidos contra el pueblo oprimido de Palestina, el Líbano y la región, se vieron obligados a aceptar un alto el fuego hoy en el pináculo de la humillación; este alto el fuego fue impuesto al régimen sionista”, añadió Qaani.
El comandante de la Fuerza Quds subrayó que este acuerdo de alto el fuego es el mismo que se había propuesto en la ronda anterior de negociaciones, pero el vergonzoso régimen sionista lo negó y no ganó nada.
“Sin embargo, las mismas cláusulas que la Resistencia Islámica Palestina y nuestros hermanos habían establecido, se vieron obligados a aceptar en esta ronda de negociaciones, y hoy a la 1 p.m., la humillación del régimen sionista y la mayor derrota que ha sufrido durante su miserable vida serán expuestas por la gracia de Dios”, agregó.
Israel lanzó su despiadada agresión contra Gaza el 7 de octubre de 2023, después de que los grupos de resistencia liderados por el Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) llevaran a cabo una operación histórica contra la entidad sionista en represalia por sus intensificadas atrocidades contra el pueblo palestino.
El régimen de Tel Aviv no logró ninguno de sus objetivos declarados de su salvaje agresión contra Gaza, incluida la liberación de los cautivos y la “eliminación” de HAMAS, a pesar de haber asesinado a unos 47 000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños.
El miércoles pasado, Israel se vio obligado a aceptar un acuerdo de alto el fuego, aceptando las condiciones de negociación de HAMAS. El primer día de tregua, además de exigir una pausa de agresiones, prevé la liberación de tres rehenes israelíes y de unos 95 prisioneros palestinos.
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