En una comparecencia ante la prensa, el jefe del Centro Nacional de Gestión de la Defensa de Rusia, el coronel general Mijaíl Mízintsev, ha alertado este viernes que los neonazis ucranianos han colocado dinamita en unas instalaciones de almacenamiento con productos químicos tóxicos en una planta de coque de la ciudad de Avdéevka, en el centro de Donetsk, para hacerla volar cuando se acerquen a la ciudad las formaciones de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD).
“Los neonazis han colocado explosivos en el depósito de tóxicos químicos de una planta de coque que planean hacer volar por los aires en cuanto entren las fuerzas de Donetsk a la ciudad”, ha declarado.
Según el alto militar ruso, esta “cruel provocación” preparada por parte de los nacionalistas de Ucrania causará la intoxicación química masiva de los habitantes de los barrios aledaños al depósito.
El Gobierno ruso ha anunciado que dispone de datos “fiables”, según los cuales, el Servicio de Seguridad de Ucrania, con apoyo de Occidente, prepara una operación de falsa bandera con el empleo de sustancias tóxicas contra civiles, para luego “culpar a Rusia del uso de armas químicas contra la población de Ucrania”.
Moscú acusa, además a Washington y Kiev de gestionar laboratorios destinados a producir armas biológicas en el país europeo, cerca de las fronteras rusas.
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