• Mohamadhosein Mojtari, embajador de la República Islámica de Irán en el Vaticano junto a papa Francisco.
Publicada: sábado, 4 de enero de 2025 21:51
Actualizada: domingo, 5 de enero de 2025 3:51

El embajador de Irán en el Vaticano presenta parte de la visión del Líder de la Revolución Islámica sobre el profeta Jesús (la paz sea con él) al papa Francisco.

Mohamadhosein Mojtari, embajador de la República Islámica de Irán en el Vaticano, se reunió este sábado con el papa Francisco, a quien entregó una placa que contenía una selección de las palabras del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, sobre el profeta Jesús (la paz sea con él), titulada “Si Cristo estuviera entre nosotros”.

Durante la reunión, el papa señaló que la placa contenía puntos destacados e importantes que podrían ser influyentes y desempeñar un papel relevante para los seguidores de la religión cristiana.

También expresó su preocupación por la situación en la región, especialmente con respecto a Palestina, y manifestó su inquietud acerca de las agresiones del régimen israelí. “Cada día, a través de mi representante en Palestina, me informo sobre las noticias, la situación y los acontecimientos en la región”, agregó.

Al final, el papa Francisco pidió al embajador de Irán en el Vaticano que transmitiera su cálido saludo al Líder de la Revolución Islámica.

 

A continuación, el texto de la placa:

Si el Profeta Jesús estuviera entre nosotros

El valor del profeta Jesús (la paz sea con él) desde la perspectiva de los musulmanes, sin duda, no es menor que el valor y la grandeza que tiene para los cristianos creyentes en el cristianismo. Este gran profeta divino dedicó todo el tiempo de su presencia entre las personas a la lucha y el esfuerzo para resistir contra la injusticia, la opresión y la corrupción, así como contra aquellos que, apoyándose en el poder de la riqueza y fuerza, esclavizaban a las naciones y las arrastraban hacia los infiernos de este mundo y el Más Allá. Los sufrimientos que este gran profeta soportó desde su niñez —cuando Dios le otorgó la profecía a tan temprana edad— fueron todos en este camino.

Se espera que los seguidores del profeta Jesús y todos aquellos que reconocen su grandeza y espiritualidad elevada, acorde con su posición sublime, lo sigan como modelo en este camino.

Si el profeta Jesús (la paz sea con él) estuviera hoy entre nosotros, no perdería ni un solo momento en luchar contra los líderes de la opresión y la arrogancia mundial. Tampoco toleraría el hambre y la desesperación de miles de millones de personas que, bajo el yugo de las grandes potencias, son explotadas y empujadas hacia la guerra, la corrupción y la hostilidad.

Hoy, los creyentes en ese gran profeta, es decir, cristianos y musulmanes, deben recurrir a las enseñanzas y el camino de los profetas para establecer un orden mundial digno, extendiendo las virtudes humanas conforme a las enseñanzas de esos maestros de la humanidad.

Seguir al profeta Jesús (la paz sea con él) implica apoyar la verdad y rechazar las fuerzas que se oponen a ella. Se espera que tanto cristianos como musulmanes, en cualquier rincón del mundo, mantengan viva esta gran lección del profeta Jesús (la paz sea con él) en sus vidas y acciones.

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