“El régimen sionista, al poseer armas nucleares y no adherirse a los tratados de no proliferación, ha puesto en grave peligro la seguridad de todos los países de la región y se ha convertido en la amenaza más importante para la paz y la seguridad del mundo”, indicó el encargado de la misión iraní en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Mohamadreza Sahrai.
En un discurso ofrecido el martes por la noche en una sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), el diplomático persa rechazó las “falsas e infundadas acusaciones” del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, contra su país en el tema nuclear y las calificó de una táctica para tapar los crimines del régimen de ocupación en la región.
“La historia del régimen sionista está llena de violentas agresiones contra el pueblo palestino, y contra los países de la región de Asia Occidental. Israel no puede encubrir sus crímenes acusando a los demás”, sostuvo.
Sus comentarios se producen en la misma jornada en que el premier israelí, en una intervención virtual en el 75.º período de sesiones de la AGNU, afirmó que Irán busca construir armas nucleares y el acuerdo nuclear firmado en 2015 “alimentó y financió” este proyecto.
El representante iraní, no obstante, resaltó que los actos hostiles de Israel contra la República Islámica de Irán y su programa nuclear pacífico “de hecho, están dirigidos a desviar la atención internacional de su arsenal de armas nucleares”.
Israel nunca ha revelado la cantidad de armas atómicas que posee, pero las estimaciones sobre el tamaño de las reservas nucleares de Israel oscilan entre 80 y 300 ojivas, según un informe publicado el pasado mes de octubre por el portal estadounidense The National Interest.
El programa de armas nucleares del régimen de Tel Aviv ha sido el principal obstáculo para la creación de una zona libre de armas nucleares en Asia Occidental.
En la actualidad, Israel es el único en la región que no se ha adherido al Tratado de No Proliferación (TNP), piedra angular del desarme nuclear y la no proliferación de las armas nucleares a nivel internacional. El régimen israelí, seguro del apoyo político y militar de Estados Unidos, tampoco ha sometido sus instalaciones nucleares a las salvaguardas totales de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
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