• La sede de Google en Estados Unidos.
Publicada: sábado, 20 de abril de 2019 1:57
Actualizada: sábado, 20 de abril de 2019 4:14

Tras presiones de la red social Instagram, Google censura a las cadenas HispanTV y Press TV, pero, ¿cuál será el siguiente paso contra los medios iraníes?

Instagram bloqueó el martes cuentas de algunas autoridades de Irán, incluidos varios comandantes del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI). Irán condenó la decisión de dicha red social, aseverando que la iniciativa pone de relieve la fragilidad de la libertad en el Occidente.

Dos días después, el motor de búsqueda estadounidense Google bloqueó una vez más y sin aviso previo, el acceso de HispanTV Press TV a sus cuentas de YouTube, bajo falsas acusaciones de que el contenido de esas cadenas viola sus normas. 

La medida ha suscitado una ola de críticas de usuarios de las redes sociales, quienes opinan que el bloqueo se debe a que las cadenas internaciones rechazan servir a los intereses del Occidente.

Asimismo, analistas que se han pronunciado sobre el tema cargan contra la censura a HispanTV y Press TV, señalando que Estados Unidos ha violado “la libertad de expresión y el derecho a informarse y recibir información veraz” con sus ataques sistemáticos a los medios iraníes.

 

Las limitaciones impuestas por Instagram y Google hacen surgir preguntas acerca de las posibles medidas que se adoptarán en el futuro contra los medios de comunicación de la República Islámica.

¿Serán bloqueadas las cuentas de HispanTV y Press TV en otras redes sociales?, o acaso, ¿serán sacadas estas cadenas del aire por proveedores de satélite?

HispanTV y Press TV han sido víctimas de censura mediática en reiteradas ocasiones. En agosto de 2018, Google bloqueó el acceso del primer medio a su canal de YouTube y Google Plus, y como consecuencia se cerraron las cuentas HispanTV, HispanTV Programas, HispanTV Documentales e HispanTV Películas y Series.

También, las autoridades iraníes han denunciado a menudo que las ofensivas contra los medios de comunicación iraníes, que prometen ser siempre la voz de los sin voz, constituyen una flagrante “violación de la libertad de expresión y la libre circulación de información”.

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