“Los estadounidenses, derrotados en sus intrigas para desmembrar Irak, ya buscan implementar el mismo plan en Siria, donde están entrenando y armando a decenas de miles de terroristas”, ha indicado este viernes el presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento de Irán (Mayles), Alaeddin Boruyerdi, además de asegurar que Washington no podrá lograr tal fin.
En esta misma línea, el legislador iraní ha indicado que EE.UU. quiere mantener a la banda ultrarradical Daesh en Siria, y ha recordado cómo Washington salvó a los terroristas encarcelados en la principal prisión de la ciudad de Al-Hasaka (norte de Siria), para luego entrenarlos en sus bases militares en el país árabe.
Los estadounidenses, asimismo, han trasladado a los extremistas a diferentes países de la región para mantener el caos en el mundo islámico, ha denunciado Boruyerdi.
Los estadounidenses, derrotados en sus intrigas para desmembrar a Irak, ya buscan implementar el mismo plan en Siria, donde están entrenando y armando a decenas de miles de terroristas”, ha indicado el presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento de Irán (Mayles), Alaeddin Boruyerdi.
Ha catalogado a Estados Unidos y el régimen de Israel como “padrinos” de Daesh, y ha elogiado la lucha antiterrorista del Ejército y el pueblo iraquíes.
“Los estadounidenses habían pronosticado que la derrota de Daesh requería de decenas de años de lucha, no obstantes, los jóvenes iraquíes, siguiendo las directrices del ayatolá Seyed Ali Sistani (máximo clérigo chií de Irak)” han mostrado a EE.UU. el poderío de Irak.
En este sentido, ha censurado las ambiciones estadounidenses para construir bases militares permanentes en Irak, en la era post-Daesh. Pretensiones rechazadas en múltiples ocasiones por el Gobierno de Bagdad.
Tras la Segunda Guerra Mundial, EE.UU. estableció bases militares permanentes en diferentes partes del mundo, y rubricó acuerdos con los Gobiernos de esos países que conceden inmunidad judicial a los militares estadounidense, como lo ocurrido en Afganistán, ha recordado Boruyerdi, para después afirmar que el Gobierno iraquí nunca ha permitido tal injerencia en su territorio.
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